Hay edificios que forman parte de la iconografía de un municipio. Construcciones que, en la mayoría de sus casos, llevan ahí plantados viendo pasar el tiempo desde que nos alcanza la memoria. Inmuebles que forman parte de la identidad de una ciudad. Uno de ellos es, sin lugar a dudas, el edificio de la Falange, o los antiguos juzgados de Vera.
Para el viandante, el simple observador, el edificio llama la atención por su estilo, un claro ejemplo de la arquitectura burguesa de finales del siglo XIX y principios del XX. Destaca sobre el resto de construcciones de su entorno, la Plaza del Hospital. Está situado junto a la Biblioteca Municipal, en un trazado de calles estrechas que desembocan en la Plaza Mayor, la iglesia y el ayuntamiento.
Para el veratense de toda la vida, este inmueble destaca también por su historia, ya que, antes de que cayese en el abandono, el edificio de la Falange tuvo muchos usos, y está ligado a cientos de recuerdos de su niñez y juventud.
Estilo burgués
Tiene una fachada de ladrillo visto y se compone de sótano, planta baja y primera planta. Cuenta con varios balcones en la plata primera y altas ventanas en la baja. La balaustrada del balcón central, así como un arco lobulado situado a la entrada, son de piedra artificial, “un material muy novedoso para la época de su construcción”, según detalla Gabriel Flores, estudioso de la historia de Vera. Destaca en su interior, además del arco que da acceso, una gran escalera central de mármol blanco, con los peldaños todos de una sola pieza.
Esta escalera está profusamente iluminada por un tragaluz central con ventanas en los lados. Las ventanas son de madera y de hierro forjado.
La juventud
A pesar de que apenas hay documentación por escrito acerca de este edificio, a través de los relatos de los vecinos de Vera de toda la vida se pueden enumerar algunos de los múltiples usos que ha tenido el inmueble. La mayoría de ellos asociados a la juventud.
Para quienes solo recuerdan sus últimos años de actividad, éste es el edificio de los antiguos juzgados. Sin embargo, para los que se criaron en la Vera de las décadas de los 50, 60 o 70, siempre será el edificio de la Falange. “Era conocido así porque era una sede del Movimiento, en el que se instaló la OJE -Organización Juvenil Española durante el franquismo-” recuerda el alcalde veratense, Félix López.
En su interior también estuvieron las oficinas del Sindicato Vertical, a donde acudían los trabajadores de la zona: agricultores y ganaderos.
Del año 1952 al 54, el edificio fue también la sede del Instituto Laboral de Vera, mientras que se terminaban las obras del que hoy es IES Alyanub.
Pero el uso que más recuerdan los veratenses para este mítico inmueble es el de salón social, algo así como una casa de la juventud. “Los jóvenes pedíamos las llaves al Ayuntamiento y teníamos cada grupo nuestra propia habitación donde hacíamos fiestas, bailes, se jugaba al tenis de mesa y, en general, había una rica actividad social”, cuenta Félix López.
Los que disfrutaron del edificio en los años 70 y 80 recuerdan con melancolía “¡esas fiestas de nochevieja!” que organizaban en sus salas. “Teníamos incluso nuestras propias nomas, con habitaciones en las que no se podía fumar”, explican.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/3/provincia/134682/el-edificio-de-los-jovenes-de-los-70-y-80