La rambla de Albox volvió a sorprender ayer a su paso por el núcleo urbano de este municipio del Valle del Almanzora. Las lluvias acaecidas durante la tarde del viernes -parte de las mismas en forma de granizo- en la zona norte del municipio hizo que, poco antes de la medianoche, el agua llegase con gran fuerza y en gran cantidad hasta la localidad albojense, presentando el mayor caudal de los registrado en los últimos años.
La salida de las ramblas de Oria y del Saliente puso a prueba el cauce levantado años atrás para este fin, ya que ambas se juntan una vez que sus cauces confluyen en el núcleo urbano de Albox. Pese a lo inédito de esta imagen (sobre todo para los más jóvenes), no hubo peligro de desbordamiento en ningún momento.
Donde no tuvieron tanta suerte, como acostumbra a pasar cada vez que la rambla llega cargada de agua, fue en barriadas de la zona norte del municipio como en la pedanía de Las Pocicas, donde las intensas lluvias que tuvieron lugar durante la tarde-noche de ayer y esta madrugada provocaron daños en numerosos accesos y caminos rurales, además del impacto que tuvo sobre cosechas como la de los almendros.
La gravedad de los desperfectos ha sido tal que el alcalde albojense, Francisco Torrecillas, ha calificado de "desastre" lo sucedido por las lluvias torrenciales caídas en las últimas horas del viernes y la madrugada del sábado.
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