Cajamar irrumpe en el PITA para instalar su nueva sede tecnológica

La gran apuesta que el Parque de Innovación y Tecnología de Almería, el PITA, esta esperando, se cerró ayer con la aprobación por parte de la Comisión Permanente del Consejo de Administración de la institución de la compra, por parte de Cajamar, de dos parcelas de 5.000 metros cuadrados por parte de Cajamar. Para los representantes del tecnoparque almeriense la operación supone un paso adelante importantísimo de cara al futuro por la capacidad de la primera entidad financiera almeriense de ejercer un papel de ‘locomotora’ en el proceso de consolidación del parque tecnológico situado al norte de El Alquián. En la puerta del PITA La operación, que ha sido llevada con absoluto sigilo por todas las partes, se daba a conocer ayer tras la aceptación por parte del Consejo de Administración de una operación que supone la venta a Cajamar, por un importe de 1.300.000 euros de las dos parcelas situadas en el acceso principal al tecnoparque. Cajamar se convertirá de esta forma en la instalación más visible para las futuras visitas al parque tecnológico almeriense, ocupando dos parcelas de 5.000 metros cuadrados. Sobre ellas se levantará un edificio que será la ‘sede tecnológica’ o ‘centro de servicios de tecnología, innovación y logística’ de la entidad financiera almeriense. Según informó ayer mismo el director de Negocio de Cajamar, Alfonso Hernández Calpena, en esta sede trabajarán en un plazo no superior a dos años alrededor de 400 personas, dedicadas básicamente a la innovación y a la aplicación de conocimiento. La compra aprobada ayer se materializará en las próximas semanas y la entidad ya ha anunciado que a primeros del año próximo se pondrán en marcha los trabajos para definir el proyecto básico del edificio, en cuya estructura e instalaciones aplicarán “modelos de desarrollo sostenible y excelencia ambiental”. Sobre las dos parcelas adquiridas al parque por un precio ‘razonable’, al aplicársele la rebaja prevista para los socios del PITA, que está en torno al 20 por ciento de su valor de mercado, se levantará un edificio que tendrá cinco plantas, tres en superficie y otras dos soterradas, con una superficie global que rondará los 11.400 metros cuadrados. En su construcción se acogerá a la Guía de Procedimientos para la Sostenibilidad del PITA, cuyas directrices han sido redactadas, precisamente, por técnicos del Área de Medio Ambiente y Sostenibilidad de la Fundación Cajamar, entre ellos uno de los mayores expertos nacionales en construcción sostenible como es Alfonso Sevilla Portillo. El consejero de Economía, Innovación y Ciencia, que presidía ayer la reunión de la Comisión Permanente del PITA, afirmaba tras la aprobación de esta operación que se trata de una ‘muy buena noticia’ para el tecnoparque almeriense “porque Cajamar es una entidad líder en Andalucía y en España que tendrá una fuerte capacidad de arrastre hacia otras empresas y otros proyectos vinculados con el parque”. La realidad del PITA Lo cierto es que el parque tecnológico sigue dando pasos hacia su consolidación definitiva como centro de negocios y, en especial, de los vinculados con la innovación y la tecnología. La cuestión es que para finales del año 2012 está previsto que puedan estar finalizados tres edificios emblemáticos que presidirán la vida del PITA, el de Transferencia y Servicios Generales, el de Tecnova, que soportará el peso del desarrollo de tecnologías agrarias, y el de la empresa LAB (Laboratorio de Análisis Bioquímicos), todos ellos ya en construcción. A ellos se sumará la sede tecnológica de Cajamar, que estará listo a lo largo del año 2013. La crisis y el PITA Alfredo Sánchez, director general del PITA, afirmaba ayer que, como al conjunto de la economía, al parque también le afecta la crisis. Sin embargo, siguen adelante los programas y el interés de numerosas empresas que han apostado por el desarrollo de este espacio de desarrollo de iniciativas empresariales. En conjunto, se han producido ya inversiones por un importe de alrededor de 55 millones de euros, según confirmaba ayer el propio consejero de Economía, Innovación