Las nubes negras que se cernían sobre el Gobierno socialista de Huércal-Overa se han convertido finalmente en la tormenta que todo el mundo esperaba. Esta mañana, el Partido Popular y Ciudadanos han registrado una moción de censura que podría desbancar a la alcaldesa Francisca Fernández de la Alcaldía de Huércal-Overa antes de que se cumpla un año de su mandato, siempre y cuando la dirección regional de la formación naranja (que desconocía los planes de la rama huercalense) no intervenga, ya sea mediando o destituyendo al único concejal de ciudadanos que apoya la moción: Jose López
Aunque María del Mar Meca, la otra edil naranja en el equipo de Gobierno, no apoya este movimiento (según han trasladado fuentes de la dirección provincial), los votos combinados de los populares y de Jose López serían suficientes para arrebatar la Alcaldía a Francisca Fernández el próximo 12 de junio, día designado para llevar a pleno la votación de la moción de censura.
Se trata de una maniobra que, aunque se veía venir en el Ayuntamiento, donde una alianza precaria entre los naranjas y el Partido Socialista mantenía el bastón de mando en manos la regidora, ha pillado por sorpresa a la dirección regional, cuyas fuentes han comunicado a este diario que se está "intentando solucionar este asunto".
Según lo previsto, la votación se llevará a pleno el 12 de junio y, si sale adelante, será Domingo Fernández, el portavoz popular, el que asuma la Alcaldía del municipio a partir de esa fecha. Sin embargo, es bien sabido que las relaciones entre Jose López y la dirección regional de Ciudadanos no son del todo fluidas y, en caso de que el edil fuera expulsado de la formación, el Partido Popular no podría sumar los apoyos necesarios para hacerse con la Alcaldía.
Durante una entrevista esta mañana en la Cadena SER, Domingo Fernández no ha descartado que, en caso de convertirse en regidor, se pueda producir una alternancia en la Alcaldía con Ciudadanos. "El tiempo lo dirá, hace unas semanas no sabíamos que se podía producir esta moción de censura", ha explicado el exregidor, que podría convertirse en el próximo alcalde muy pronto.
Las desavenencias entre Ciudadanos y el Partido Socialista huercalense comenzaron prácticamente en el inicio de la legislatura y llevaron al partida naranja a darle la espalda a sus socios para votar junto al Partido Popular en varias ocasiones.
El pasado octubre, José López, edil de Ciudadanos en el equipo de Gobierno, se convertía en representante del Consistorio en el Grupo de Desarrollo Rural del Levante Almeriense con la luz verde del Partido Popular, que recibía a cambio el puesto de representante suplente ante este organismo, que recayó en manos de Mónica Navarro gracias a los votos de Ciudadanos.
Las tensiones llegaron a su punto álgido a finales de enero, cuando PP y Ciudadanos volvieron a unir sus fuerzas de nuevo en contra del Partido Socialista, en un movimiento similar al anterior y que convirtió a Jose López en representante del Consistorio ante la empresa de aguas públicas Galasa (un puesto que le arrebató a su compañera de partido, María del Mar Meca) y a Blas Melchor Sánchez (PP) en su suplente.
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