Almería se sitúa como la zona europea con mayor potencial solar

La provincia de Almería y, en general, Andalucía, se han colocado a la cabeza de los territorios europeos para la producción de energías renovables, según apuntan estudios como los realizados por ANPIER (Asociación Española de Productores de Instalaciones Renovables) o la propia Agencia Andaluza de la Energía.

En el caso de Almería las ventajas para acometer la producción energética a través de sistemas alternativos a las convencionales se basan en poder disponer de casi un 90 por ciento de días soleados al año, que además se presentan con un alto nivel de irradiación solar que aumentan la capacidad de producción de este tipo de instalaciones.

Días de sol

Con esa disponibilidad, una planta de producción de energía solar fotovoltaica instalada en la provincia dispondría de cerca de 3.000 horas anuales de sol, un 20 por ciento superior a la media española (que se sitúa a su vez entre las más altas del continente), calculada en una cifra ligeramente superior a las 2.500 horas.

La solar no es la única energía con posibilidades de alcanzar amplios ratios de rentabilidad en la provincia ya que el régimen de vientos permite el desarrollo de los parques eólicos.

De hecho, hasta ahora este tipo de instalaciones han liderado con suficiencia la producción de renovables en Almería, ya que de los 752 megavatios que estaban en producción al cierre del ejercicio de 2020 más del 68 por ciento, en total 511 megavatios, procedían de alguno de los parques eólicos distribuidos por buena parte de la provincia, sobre todo en la comarca del alto y medio Almanzora.

Potencial

La eclosión de este sector de las renovables que se ha producido en los cuatro últimos años ha ido incrementando la capacidad de las plantas de generación que, a estas alturas, estarían cerca de poder cubrir el cien por cien de la demanda de electricidad de la provincia.

Si esa capacidad era la disponible a finales del pasado año, los planes de inversión que siguen entrando en las administraciones públicas permiten augurar un aumento de la potencia instalada que se duplicaría en unos pocos años.