Antonio Crisol
22:53 • 07 feb. 2012
Más de 24 horas de apagones, cortes de luz continuos, bajadas y subidas de tensión y, en general, “un mal servicio” prestado en toda la comarca de Los Vélez por la compañía Endesa, cuya “incompetencia” llegó a un nuevo punto álgido entre el domingo y el martes, han llevado a la desesperación y movilizado a decenas de vecinos que han comenzado a organizarse a través de las plataformas sociales con el fin de pasar de las reiteradas quejas verbales y escritas a buscar la manera de agruparse para interponer una denuncia judicial.
LA VOZ ha tenido acceso a una carta firmada por Eli Expósito, con el apoyo de muchos velezanos, en la que hacen pública la situación “desesperante” que existe con el suministro eléctrico y que a pesar de las reiteradas quejas “seguimos sufriendo desde hace años”.
Aseguran estos vecinos “que en una comarca donde pagamos impuestos como el resto de mortales y donde sufrimos la crisis como los que más”, se añade una situación “vergonzosa” y que son “los impedimentos, obstáculos y zancadillas constantes a las que nos somete Endesa”.
“Haga viento, sol o lluvia”
“Desde hace años, tanto en verano como en invierno, haga viento, sol, lluvia, sequía o, simplemente, el cielo se vea surcado del azul más profundo, el suministro eléctrico es irregular, inconstante y deficiente”.
“Como cualquier persona”, añaden, “hemos sido comprensivos y pacientes,esperamos las respuestas y las soluciones anunciadas que nunca llegan, las promesas de inversión que no se cumplen y, aún así, seguimos esperando, que la carambola electoral, particular o plural tenga lugar y la electricidad se nos proporcione como debiera, de manera constante, fluida, ya que está cobrada justamente”.
Relatan los velezanos que rubrican la carta que “esta pasada Navidad hemos tenido que soportar noches de frío, cenas y reuniones a la luz de las velas, muy romántico, pero el señor hostelero no pensaba lo mismo cuando su trabajo no podía verse realizado, los servicios públicos se limitaban, los comercios, las fábricas, las residencias de mayores, de menores, los ciudadanos, todos, se veían afectados. Y en un momento tan crítico como la Navidad, donde la imagen para el turismo es tan importante, donde el frío es protagonista inevitable”.
Daños y pérdidas
La carta que evidencia la indignación de años de toda una comarca también valora los daños personales de este “ineficaz suministro eléctrico”, que pasa por electrodomésticos fundidos, averías en equipos de uso personal y profesional, daños en instalaciones “y la impotencia que se siente ante un hecho que no puedes solventar, y por el pagas, sin rechistar”.
Y ante esto Endesa, aseguran, “tiene la desvergüenza de reírse de nosotros, comunicándonos el lunes que no tienen incidencias en la zona. Y esa es toda la respuesta, esa es la garantía de calidad de la propietaria privada de nuestro suministro eléctrico”.
Pérdidas económicas
Concretamente, en los casi dos días de servicio irregular tanto en Vélez Rubio como en Vélez Blanco, María, Chirivel y sus pedanías, “muchos tuvimos que dejar de ir a una cafetería, porque no podían servirte nada caliente ni cobrártelo, no podías hacer una compra en un supermercado, las cajas no funcionaban, ni las balanzas, las fábricas tuvieron que detener sus procesos productivos, muchos ordenadores ‘murieron’, los equipos se reiniciaron en una locura de picos de tensión y nada puede garantizar su continuidad tras esta pesadilla”. Además, en Vélez Blanco llegan incluso a ver su suministro de agua interrumpido, porque es una bomba eléctrica la que genera la energía para distribuirla.
Los vecinos que se aunarán en una plataforma aseguran no ser ciudadanos de segunda, ni pagar como si lo fueran. “Estamos cansados de esperas vanas, de respuestas que no llegan y se nos ha agotado la paciencia. Tenemos derechos, muy básicos, que están siendo pisoteados sistemáticamente por una empresa que nos ignora y que no invierte en líneas antediluvianas, que mantiene instalacio
LA VOZ ha tenido acceso a una carta firmada por Eli Expósito, con el apoyo de muchos velezanos, en la que hacen pública la situación “desesperante” que existe con el suministro eléctrico y que a pesar de las reiteradas quejas “seguimos sufriendo desde hace años”.
Aseguran estos vecinos “que en una comarca donde pagamos impuestos como el resto de mortales y donde sufrimos la crisis como los que más”, se añade una situación “vergonzosa” y que son “los impedimentos, obstáculos y zancadillas constantes a las que nos somete Endesa”.
“Haga viento, sol o lluvia”
“Desde hace años, tanto en verano como en invierno, haga viento, sol, lluvia, sequía o, simplemente, el cielo se vea surcado del azul más profundo, el suministro eléctrico es irregular, inconstante y deficiente”.
“Como cualquier persona”, añaden, “hemos sido comprensivos y pacientes,esperamos las respuestas y las soluciones anunciadas que nunca llegan, las promesas de inversión que no se cumplen y, aún así, seguimos esperando, que la carambola electoral, particular o plural tenga lugar y la electricidad se nos proporcione como debiera, de manera constante, fluida, ya que está cobrada justamente”.
Relatan los velezanos que rubrican la carta que “esta pasada Navidad hemos tenido que soportar noches de frío, cenas y reuniones a la luz de las velas, muy romántico, pero el señor hostelero no pensaba lo mismo cuando su trabajo no podía verse realizado, los servicios públicos se limitaban, los comercios, las fábricas, las residencias de mayores, de menores, los ciudadanos, todos, se veían afectados. Y en un momento tan crítico como la Navidad, donde la imagen para el turismo es tan importante, donde el frío es protagonista inevitable”.
Daños y pérdidas
La carta que evidencia la indignación de años de toda una comarca también valora los daños personales de este “ineficaz suministro eléctrico”, que pasa por electrodomésticos fundidos, averías en equipos de uso personal y profesional, daños en instalaciones “y la impotencia que se siente ante un hecho que no puedes solventar, y por el pagas, sin rechistar”.
Y ante esto Endesa, aseguran, “tiene la desvergüenza de reírse de nosotros, comunicándonos el lunes que no tienen incidencias en la zona. Y esa es toda la respuesta, esa es la garantía de calidad de la propietaria privada de nuestro suministro eléctrico”.
Pérdidas económicas
Concretamente, en los casi dos días de servicio irregular tanto en Vélez Rubio como en Vélez Blanco, María, Chirivel y sus pedanías, “muchos tuvimos que dejar de ir a una cafetería, porque no podían servirte nada caliente ni cobrártelo, no podías hacer una compra en un supermercado, las cajas no funcionaban, ni las balanzas, las fábricas tuvieron que detener sus procesos productivos, muchos ordenadores ‘murieron’, los equipos se reiniciaron en una locura de picos de tensión y nada puede garantizar su continuidad tras esta pesadilla”. Además, en Vélez Blanco llegan incluso a ver su suministro de agua interrumpido, porque es una bomba eléctrica la que genera la energía para distribuirla.
Los vecinos que se aunarán en una plataforma aseguran no ser ciudadanos de segunda, ni pagar como si lo fueran. “Estamos cansados de esperas vanas, de respuestas que no llegan y se nos ha agotado la paciencia. Tenemos derechos, muy básicos, que están siendo pisoteados sistemáticamente por una empresa que nos ignora y que no invierte en líneas antediluvianas, que mantiene instalacio
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