La inestabilidad meteorológica sigue presente y en las próximas jornadas se va a mantener. El buen tiempo que suele traer consigo la primavera tendrá que esperar.
Mucho se está hablando en los últimos días de una alerta por un 'meteotsunami' en el Mediterráneo, que afectaría a provincias como Almería, Málaga, Granada y Melilla, entre otras. En los últimos días se ha extendido por todo el país este nuevo concepto, un supuesto fenómeno consistente en la presencia de fuertes vientos sobre el mar capaces de generar olas de gran tamaño que podrían tener un efecto más o menos destructivo en las zonas costeras.
Pero, ¿es correcto usar este término?
Los meteorólogos advierten que esta alarma no se sustenta ni en fenómenos reales ni en la terminología oficial de la ciencia meteorológica, y menos aún en lo que se refiere a las costas de la provincia de Almería. Lo aclara Eduardo Romay, del colectivo almeriense de analistas climáticos ‘Cazatormentas’, que explica que en Almería y sus costas los únicos precedentes de tsunamis son aquellos con origen sísmico, es decir terremotos o maremotos capaces de generar grandes olas que, en varios episodios a lo largo de la historia han dejado mapas de destrucción en localidades como Adra, Roquetas o la propia capital.
Sí existen tsunamis de origen meteorológicos en otras zonas del mundo, particularmente en las costas de Estados Unidos en las que la presencia de fuertes huracanes generan un efecto de succión del agua del mar y provocan olas de gran magnitud.
En España los tsunamis vinculados con la meteorología sólo tienen dos localizaciones conocidas, los que afectan de tiempo en tiempo a las Islas Baleares, conocidos como ‘rissagas’ o las que llegan a las Islas Canarias, donde se denominan ‘mareas del pino’ (por tener lugar en septiembre, cuando se celebra la festividad de la Virgen del Pino). Casi en ningún caso se pueden calificar como fenómenos catastróficos.
En el caso de Almería ese fenómeno de las rissagas “no se ha dado jamás”, según Romay, que señala que en momentos de vientos muy fuertes sobre el mar se pueden generar olas de tres o cuatro metros, que pueden ser de algo más en algún caso, pero que en cualquier caso quedan muy lejos del concepto de tsunami.
Explicación
Eduardo Romay aclara que existe un tipo de fenómeno costero que puede ser peligroso, sobre todo en calas, bahías, litorales muy llanos y poco elevados, etc. y es el que consiste en una oscilación brusca del nivel del mar. Este tipo de oscilaciones se suelen clasificar según su origen:
-Origen meteorológico: se producen por variaciones bruscas de la presión, variaciones que pueden tener lugar por el paso de frentes activos, por presencia de ondas gravitatorias, de huracanes, etc... Entre estas se incluirían las ya mencionadas rissagas.
-Origen no meteorológico: se producen por desplazamiento vertical de grandes masas de agua debido a terremotos marinos, caída de meteoritos, erupciones volcánicas, etc... A estas oscilaciones las conocemos como tsunamis.
La inexactitud del término ‘meteotsunami’ queda en evidencia si se tiene en cuenta que ni la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ni el resto de agencias meteorológicas internacionales lo incluyen en sus términos para definir este tipo de fenómenos. Según Romay, es un término ‘inventado’ para llamar la atención y obtener visitas en las webs de medios de comunicación o en redes particulares.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/3/provincia/234849/es-correcto-hablar-de-meteotsunami-un-experto-meteorologico-lo-aclara