María Medina
07:00 • 19 mar. 2012
Empresas e instituciones públicas aguardan hasta el último momento para organizarse de cara al 29-M, día en el que está convocada la primera huelga general frente a las decisiones económicas del Gobierno de Mariano Rajoy. La mayoría están a la espera de que los respectivos comités de empresa comuniquen la decisión de la mayoría de los trabajadores.
No obstante, hay algunos servicios que tienen clara la situación. Las Urgencias médicas están “garantizadas” y funcionarán al 100%. El resto de servicios sanitarios dependerá de la decisión de cada trabajador, no obstante, responsables de Salud en la provincia entienden que, como mínimo, el servicio será similar al de un día festivo.
La delegación de Educación no se ha pronunciado hasta el momento y, en principio, los centros educativos abrirán sus puertas. Otra cosa es cómo se organizarán las clases en función del seguimiento de la huelga por parte del profesorado.
En cuanto a los transportes, la Intermodal abrirá sus puertas como cualquier otro día. No obstante, será cada compañía de transporte la que se responsabilice de sus servicios. En autobuses, Alsa es la empresa con mayor movimiento en la estación almeriense y, por lo pronto, sus responsables señalaban a este periódico que no había recibido ninguna notificación de huelga. Y es que, los trabajadores no tienen obligación de comunicar con antelación a los empresarios qué decisión van a tomar frente a una huelga. Pueden, incluso, cambiar de opinión a lo largo de la jornada.
De hecho, los piquetes informativos tienen, inicialmente, la misión de informar a los trabajadores de los motivos de la huelga, de sus consecuencias y del derecho que todos tienen a hacerla.
Por lo que se refiere al transporte ferroviario, ya la semana pasada, Renfe suspendía temporalmente la venta de billetes de tren para esa fecha; y sólo cuando se establezcan los servicios mínimos, se reanundaría la comercialización.
En cuanto al transporte sanitario, Ambulancias Quevedo, por ejemplo, no puede pronunciarse hasta que el comité de empresa le informe de la situación de los trabajadores ante el 29-M.
Cooperativas dedicadas a la distribución, como Coexpal o Ecoal, tienen previsto abrir. “Es nuestra obligación”, aseguraba ayer Alfonso Zamora, gerente de esta útlima entidad que aglutina a las alhóndigas almerienses. “Otra cosa, es si habrá después que cerrar o no en función de la presión de los piquetes”. Precisamente, y con ánimo previsor, buena parte de las distribuidoras acostumbran a adelantar o retrasar las grandes cargas ante “días especiales”.
Coexpal, que algutina a cooperativas y alhóndigas, está a la espera de una comunicación para organizar la distribución, dice su gerente, Manuel Galdeano.
El comercio, grande y pequeño, se manifiesta de forma diferente. Los pequeños comerciantes decidirán si abren o cierran, “prácticamente en el último momento”. Muchos, en función de la acción de los piquetes, reconocen algunos, que prefieren que su nombre no sea publicado.
Las grandes superficies, como Carrefour, por ejemplo, están dispuestas a abrir sus puertas. Sus valoraciones, que las hacen a nivel sectorial y para toda España, incluyen una mención al derecho de los trabajadores de hacer huelga y de ir a trabajar en el caso de que así lo estimen oportuno.
Por su parte, la subdelegación del Gobierno en Almería señala que las instituciones públicas tienen previsto abrir con normalidad para dar servicio a los ciudadanos, también el 29 de marzo.
No obstante, hay algunos servicios que tienen clara la situación. Las Urgencias médicas están “garantizadas” y funcionarán al 100%. El resto de servicios sanitarios dependerá de la decisión de cada trabajador, no obstante, responsables de Salud en la provincia entienden que, como mínimo, el servicio será similar al de un día festivo.
La delegación de Educación no se ha pronunciado hasta el momento y, en principio, los centros educativos abrirán sus puertas. Otra cosa es cómo se organizarán las clases en función del seguimiento de la huelga por parte del profesorado.
En cuanto a los transportes, la Intermodal abrirá sus puertas como cualquier otro día. No obstante, será cada compañía de transporte la que se responsabilice de sus servicios. En autobuses, Alsa es la empresa con mayor movimiento en la estación almeriense y, por lo pronto, sus responsables señalaban a este periódico que no había recibido ninguna notificación de huelga. Y es que, los trabajadores no tienen obligación de comunicar con antelación a los empresarios qué decisión van a tomar frente a una huelga. Pueden, incluso, cambiar de opinión a lo largo de la jornada.
De hecho, los piquetes informativos tienen, inicialmente, la misión de informar a los trabajadores de los motivos de la huelga, de sus consecuencias y del derecho que todos tienen a hacerla.
Por lo que se refiere al transporte ferroviario, ya la semana pasada, Renfe suspendía temporalmente la venta de billetes de tren para esa fecha; y sólo cuando se establezcan los servicios mínimos, se reanundaría la comercialización.
En cuanto al transporte sanitario, Ambulancias Quevedo, por ejemplo, no puede pronunciarse hasta que el comité de empresa le informe de la situación de los trabajadores ante el 29-M.
Cooperativas dedicadas a la distribución, como Coexpal o Ecoal, tienen previsto abrir. “Es nuestra obligación”, aseguraba ayer Alfonso Zamora, gerente de esta útlima entidad que aglutina a las alhóndigas almerienses. “Otra cosa, es si habrá después que cerrar o no en función de la presión de los piquetes”. Precisamente, y con ánimo previsor, buena parte de las distribuidoras acostumbran a adelantar o retrasar las grandes cargas ante “días especiales”.
Coexpal, que algutina a cooperativas y alhóndigas, está a la espera de una comunicación para organizar la distribución, dice su gerente, Manuel Galdeano.
El comercio, grande y pequeño, se manifiesta de forma diferente. Los pequeños comerciantes decidirán si abren o cierran, “prácticamente en el último momento”. Muchos, en función de la acción de los piquetes, reconocen algunos, que prefieren que su nombre no sea publicado.
Las grandes superficies, como Carrefour, por ejemplo, están dispuestas a abrir sus puertas. Sus valoraciones, que las hacen a nivel sectorial y para toda España, incluyen una mención al derecho de los trabajadores de hacer huelga y de ir a trabajar en el caso de que así lo estimen oportuno.
Por su parte, la subdelegación del Gobierno en Almería señala que las instituciones públicas tienen previsto abrir con normalidad para dar servicio a los ciudadanos, también el 29 de marzo.
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