Espectacular encendido navideño: Mojácar brilla ya con más fuerza que nunca

Ocho manos inocentes han sido las encargadas de iluminar Mojácar como nunca antes se había hecho. Fueron las manos de cuatro jóvenes mojaqueros acompañados por el alcalde, Francisco García, las que este viernes han pulsado el botón de encendido y, con esta acción, volvieron a hacer de Mojácar por segundo año consecutivo un destino turístico que brilla con luz propia en Navidad.

La multitud que acudió al acto de encendido, amenizado además por los villancicos de Raya Real, fue testigo. Si ya el año pasado el alumbrado extraordinario con motivos navideños instalado por Ferrero Rocher dejó a quienes visitaron el pueblo mojaquero con la boca abierta, este año las mandíbulas pueden llegar al suelo.

Y es que el Ayuntamiento ha decidido aprovechar la continuidad de la iluminación que trajo consigo el concurso de la marca de bombones para poner de su parte y aprovechar esta condición ventajosa para consolidarse como un destino turístico navideño. A los en torno a 100.000 euros en los que según fuentes municipales se valora la iluminación instalada el pasado año, el Consistorio le ha sumado otros 100.000 para que una de las navidades más bonitas de la provincia llegue a prácticamente todos los rincones del pueblo y brille con más fuerza que nunca.

Tal y como ocurriera hace un año, entonces con la presencia del presentador Jesús Vázquez, la Plaza Nueva fue de nuevo el escenario en el que tuvo lugar pocos minutos después de las siete de la tarde el encendido del alumbrado extraordinario ante miles de personas.

Por delante, varias semanas en las que Mojácar lucirá la iluminación de Navidad más ambiciosa de las que hasta ahora se hayan instalado en la localidad. Esto, sumado al encanto natural e histórico de cada una de sus calles, edificios y plazas, hará a buen seguro que desde este viernes la llegada de visitantes sea continua. Al menos hasta que, el próximo 14 de enero, las luces se apaguen y dejen paso al atractivo habitual del pueblo mojaquero. Que no es poco.