Derraman “aceite de motor” en una zona recién renovada del Malecón

Tan sólo unas semanas después de su renovación, los actos vandálicos se han cebado con el pavimento del conocido Malecón de Garrucha. No se trata, ni mucho menos, del primer acto de este tipo que sufre la localidad garruchera en los últimos días aunque por motivos obvios, sí que es uno de los que más han indignado en el Ayuntamiento de la localidad, que ya ha denunciado estos hechos.

“Ese fin de semana los actos vandálicos fueron muy intensos. Como responsable de Obras y Servicios el sábado a las ocho de la mañana recibí la primera llamada sobre vertido de una garrafa de aceite de motor usado y que se había esparcido por todo el tramo nuevo del Malecón. Y el día siguiente la Policía Local me llamó indicándome que la mayoría de los contenedores de Garrucha tenían la basura fuera y esparcida por los animales”.

Los hechos tuvieron lugar el pasado sábado 18 de mayo y desde el Consistorio se han realizado varias gestiones para confirmar el origen de esta acción, una de ellas para descartar la posibilidad de que se haya producido por una posible avería de una máquina municipal. En este sentido, el informe especifica que “una vez hablado con los conductores de estos vehículos” estos han manifestado “que no se han subido a dicha baldosa y zona a realizar ningún trabajo”.

El documento continúa afirmando que “esta barredora realiza su trabajo en unas de las zonas altas del municipio por lo tanto no trabaja en esa zona actualmente”. Conclusiones que apuntan a que no se trata de una avería o un hecho puntual junto con los datos recabados por la Policía Local, que en su informe subraya el hallazgo de “una garrafa con aceite de motor en su interior”.

En el mismo informe se destaca cómo “los agentes intuyen que la garrafa la han podido coger de alguna parte del puerto” por lo que “posiblemente el aceite sea proveniente del cambio del mismo de una embarcación”.

Ante estos hechos, el teniente de alcalde recuerda no sólo cómo afectan a la imagen de un pueblo turístico como el de Garrucha sino el coste que tienen en recursos humanos y económico para las arcas municipales. Los operarios trabajaron para intentar invisibilizar al máximo posible la mancha, lo que unido con lo sucedido en los contenedores ha supuesto un gasto extra de entorno a 1.000 euros para todos los garrucheros.