Es, sin duda, uno de los tesoros ocultos de la provincia de Almería. El Paraje Natural Karst en Yesos de Sorbas tiene más de 1.000 cavidades excavadas en yeso, gran cantidad de galerías repletas de estalactitas y estalagmitas y kilómetros de galerías.
La acción milenaria de las aguas de lluvia sobre los yesos de la depresión de Sorbas ha ido dando lugar al modelado kárstico de este paisaje peculiar, que en 1989 fue declarado Paraje Natural; en 2002, Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA); y en 2016, Zona Especial de Conservación.
Un espacio protegido que cada año es visitado por más de 20.000 personas. Natur Sport Sorbas S.L. es la empresa que gestiona estas visitas, a excepción de algunas actividades que se organizan puntualmente. Los escolares y las familias son sus principales visitantes. "Ahora se inicia la campaña con los centros educativos, mientras que los grupos familiares se distribuyen entre los puentes, Semana Santa y el verano, en gran medida", señala Diego Contreras de la citada empresa de turismo activo que solo cesa su actividad durante varios días en los meses de diciembre y enero.
Natur Sport Sorbas ofrece tres recorridos espeleológicos diferentes por algunas de las cuevas más representativas de este paraje. La ruta básica, "la que realizan el 80% de los visitantes", es de una hora y media o dos de duración. Esta está pensada, principalmente, para un primer acercamiento de iniciación y para las familias, con visitantes desde los tres años. De dificultad baja es una primera experiencia en una cueva natural. El itinerario dentro esta es fácil, casi todo es horizontal, pero en algunos casos hay que trepar un poco y en otros gatear algo.
El segundo de los recorridos es una ruta combinada, de unas cuatro horas de duración. De dificultad media está pensada para que quien realice la ruta practique el deporte de la espeleología al tiempo que disfruta de un paisaje subterráneo excepcional. "La ruta recorre galerías de dos cuevas muy diferentes del Karst en Yesos de Sorbas, en una, las galerías están repletas de estalactitas y estalagmitas; en otra podemos admirar el reflejo de los cristales de yeso al recibir la luz de nuestros cascos. El itinerario dentro de las cuevas es algo complicado, en algunos casos hay que trepar y en otros atravesar gateras de varios metros", se especifica en la web de la empresa.
La tercera de las rutas que se ofrecen es una de carácter técnico de cuatro horas y media de duración. De dificultad alta, el recorrido se desarrolla en su totalidad en la Cueva del Tesoro, "posiblemente la cueva más importante del karst en yesos por la espectacularidad de sus cristales y el tamaño de los mismos, así como por la intensidad de su recorrido, con pasos verdaderamente complicados para personas ajenas a este deporte. Durante la ruta existen algunos tramos en los que por seguridad se equipa al visitante de arnés y se emplea cuerda para hacer rápel unos metros", aclara Natur Sport Sorbas.
Monitores y material utilizado
"Para todas estas actividades se cuenta con monitores especializados, adscritos a las Federaciones Andaluza y Española de Espeleología, además de monitores titulados por la Escuela Española de Espeleología. Los equipos utilizados en las actividades están homologados, la iluminación es eléctrica basada en baterías recargables de larga duración y está diseñada especialmente para la espeleología. Todas las rutas se pueden realizar en español, inglés, francés y alemán, dependiendo de la época del año o del número de participantes", se especifica en la web de la empresa.
Por su cercanía a la costa, son muchos los turistas que visitan la provincia que se reservan un día para conocer estas cuevas almeriense, afirma Diego Contreras.
La peculiaridad de estas formaciones la convierten en únicas. "Es un tipo de roca en la que no es muy frecuente que se formen cuevas. En España, es el único karst en yesos que hay y no una cueva formada en caliza como pasa en el reto. Esta, además, es una roca viva, cristalina y que genera muchos reflejos, no es apagada como otras cuevas", especifica.
De este paraje natural, la Cueva del Agua es la más grande (8 kilómetros) y la Cueva de Covadura la más profunda (120 metros); también se han de destacar la Cueva del Yeso y la Cueva del Tesoro, tal vez la de mayor belleza, según destaca la Junta de Andalucía.
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