La banda recibió envíos de dinero de mafiosos asentados en Rusia

La operación Cima-Visor ha destapado una compleja red criminal acusada de robos de vehículos de alta gama y asaltos a viviendas en la provincia de Almería, pero es mucho más. La intervención conjunta de la Policía Nacional y la Guardia Civil ha cortado un “peligroso” hilo conductor entre la organización, integrada por ciudadanos del este de Europa, y mafiosos de origen ruso.

Según consta en las diligencias y acreditan fuentes del caso, la banda había establecido relaciones con personas aficandas en Rusia, presumiblemente vinculada a tráficos ilícitos como la introducción de hachís, aunque este extremo no está aún confirmado. Desde ese país se enviaron en los últimos meses cantidades de dinero, cuya cuantía se desconoce y que habrían permitido a la organización encontrar una vía de financiación adicional a la venta de vehículos de alta gama y el robo de joyas y objetos electrónicos.

La Guardia Civil y la Policía ya reconocieron de forma oficial que entre los muchos efectos intervenidos en los diez registros simultáneos realizados se encontraron drogas. En una vivienda de la calle Pocico, en Roquetas de Mar, se hallaron 26 kilos de hachís, mientras en un inmueble de Camino de El Bobar, en Almería, los agentes descubrieron una pequeña plantación clandestina de marihuana.

En cualquier caso, al menos hasta la operación Cima-Visor, la principal fuente de ingresos seguían siendo los asaltos. La red tenía estructura piramidal, encabezada por un líder y un “lugarteniente”. En el segundo escalón estaba el comando y en el tercero los colaboradores. En total hay 20 detenidos, 19 de ellos en prisión por orden del Juzgado de Instrucción número Dos de El Ejido, incluido uno de los condenados por el secuestro en 1987 de la pequeña Melodie Nakachian en Marbella.

El comando estaba integrado por “auténticos profesionales del robo”, en palabras de los agentes. Preparaban los asaltos a viviendas con extremado cuidado, con vigilancias previas a los inmuebles y un estudio de las escapatorias, siempre cercanas a la autovía. Según los informes policiales, contaban con un “set” para los robos formado por una bolsa con pasamontañas, guantes, ropa negra, equipos de intercomunicación y herramientas.  

Reventaban los bombines de las cerraduras con un sistema conocido en el argot como ‘sacacorchos’, desvalijaban las propiedades y huían en coches sustraídos previamente, a menudo‘maquillados’ para despistar a los controles.
Hasta el momento se han imputado a los detenidos los robos en viviendas de Puente del Río (Adra), Balanegra (El Ejido), Aguadulce y la Urbanización deRoquetas de Mar. En total, una decena. Además, se han encontrado 15 vehículos robados, algunos de ellos denunciados en la zona de Nueva Almería, en la capital.