Alcalde y concejales de Velefique se quitan el sueldo por los problemas económicos del Ayuntamiento payda

Hace ya tiempo que el alcalde y los concejales de la localidad de Velefique no tienen sueldo ni otras asignaciones económicas fijas. Y desde el pasado jueves se han quedado también sin las compensaciones económicas que les retribuían su asistencia a los plenos. No ha sido un decreto ni una ley, sino una propuesta llevada al pleno del pasado viernes y aprobada por unanimidad.
Tampoco es que vayan a perder un dineral, ya que el pago por asistencia a pleno estaba establecido en 15 euros por cabeza, en total 105 euros por los siete concejales que componen la Corporación, de ellos cinco de Izquierda Unida, uno del PSOE y otro del PP. A partir de ahora el coste de esos concejales para el Ayuntamiento es ‘cero’.
Trabajar por la comunidad
Lo cuenta el primer edil, Rafael García Sola, uno de los muy escasos alcaldes que le quedan a Izquierda Unida en Andalucía. Y dice que el hecho de que se aprobara la propuesta por unanimidad “es una demostración a la gente de que se puede hacer política, prestar un servicio a la comunidad, sin ningún coste, sin ningún interés económico”.
Ese ahorro en la factura del Ayuntamiento, esos cien euros mensuales que se quedarán en las arcas municipales, ya tienen un destino: se utilizarán para preparar una fiesta popular, una verbena, que servirá también para la inauguración de la piscina del pueblo. Naturalmente habrá baile pero “tendremos que buscar una banda que no nos cobre mucho, porque con lo que cobraban los concejales no da para mucho”.
El alcalde ha señalado que uno de los motivos de satisfacción de la Corporación es que Velefique no tiene deudas, lo cual no deja de ser un activo importante a la hora de abordar proyectos. En los últimos años se completaron la piscina, un restaurante que se dio en concesión a una familia del pueblo para crear empleo, una zona recreativa y otros equipamientos. Lo siguiente serán las cinco casas rurales que se están construyendo para fomentar la llegada de visitantes, de las que una ya está a punto de terminarse y entrar en servicio.
Rafael García espera que todas estas iniciativas sirvan para atraer a un número de visitantes que no ha dejado de crecer en los últimos años, entre ellos muchos ciclistas que suben a Los Filabres.