Francisco Martínez-Amo, presidente del Colegio de Médicos de Almería: “No se puede ofrecer lo mismo con menos recursos. Es imposible”

Preside el Colegio Oficial de Médicos de Almería desde hace más de tres años y, aunque procura mantener el optimismo y no pierde la sonrisa ni las formas, vive con preocupación y, a veces indignación, la situación a la que se ha llevado al sistema público de salud. Francisco Martínez Amo, otorrino, conoce y vive recortes salariales y también, dice, de calidad no sólo hacia el médico, del que defiende su vocación de servicio, sino también hacia el paciente. Hace unos días Martínez Amo recibía a más de treinta colegiados en la sede. “Escucho y trato de dar ánimos”, asegura.

¿Cómo están viviendo los médicos los últimos recortes?
Los eventuales y los interinos han visto reducida al 75% su jornada laboral contratada. Ven aumentar la temporalidad de sus contrarios y disminuir la continuidad asistencial. Son medidas éstas que no tienen más pretensiones que una confiscación económica.

¿Quién pierde?
Todos. Con estas medidas se está menoscbando la calidad del sistema nacional de salud porque no se puede ofrecer lo mismo con menos recursos. Es sencillamente imposible.

Los responsables sanitarios mantienen que no se perderá calidad.
No se puede ni se debe exigir a los eventuales e interinos afectados por recortes que realicen la misma labor que hacían con una jornada más amplia.

Sí, pero, ¿de quién depende esto?
Los directores de unidades clínicas de gestión deben hacer cuadrantes ajustados al recorte realizado. De no hacerlo, sería indigno, injusto e ilegal. Contrario al objetivo mínimo que los profesionales sanitarios y todos los ciudadanos queremos alcanzar: Un sistema de salud eficaz.

¿Se puede corregir esta ilegalidad?
Los médicos están usando los servicios jurídicos del Colegio para presentar reclamaciones en contra del real Decreto del 19 de junio de 2012.

La Administración puede dar a entender que el médico mira, así, por él y no por el ciudadano.
Prefiero pensar que la Administración es consciente de que el médico andaluz ha trabajado por vocación y con ética por encima, incluso, del compromiso contractual que adquirió con la Administración. Ha superado su horario de trabajo y ha dado una imagen que, sin duda, ha contribuido a engrandecer el sistema nacional de salud. Nunca se podrá imputar a los profesionales la merma de calidad en el sistema.

Merma que existe...
Ya le decía que no se puede dar lo mismo con menos recursos. En todo caso, quiero hacer llegar a los usuarios del SAS y a todos los pacientes de Almería que la disminución de la cartera de servicios que, irremediablemente, conlleva un empeoramiento de la calidad de la asistencia sanitaria, no es ni será imputable a los profesionales de la medicina que están sufriendo, en primera persona, las consecuencias de unas decisiones impuestas.

¿Lo entenderán así los pacientes?
Los ajustes tomados por la Administración se asemejan a mutilaciones a los médicos. Es difícil entender que los recortes afecten a pilares tan fundamentales como es la sanidad o como es la educación, mientras todos vemos cómo ciertos servicios supérfluos, poco operativos y deficitarios, se mantienen. Los médicos, además, de sanitarios, somos ciudadanos y estamos sufriendo todos los recortes.

¿Cómo van encajando los cambios?
Es difícil encajar que se impongan recortes que suponen tantas carencias en san