Almería se identifica como ciudad de servicios y también turística. Pocos saben que, detrás de El Ejido y Níjar es el tercer municipio con más superficie agrícola bajo plástico de la provincia. Son 2.500 las hectáreas de explotación agrícola en invernaderos a las que, en caso de necesidad o interés, podrían sumarse otras 2.000 más, susceptibles de convertirse en zona agrícola bajo plástico. Lejos de obviar esta realidad, el Ayuntamiento trabaja en estrecha colaboración con los agricultores almerienses y ya ha ejecutado varios planes de mejora en este sector.
Sólo en los últimos años, el Ayuntamiento, a través del Plan de Mejora de Caminos Rurales, ha renovado, reforzado y rehabilitado 126 caminos rurales que transcurren entre las diferentes fincas agrícolas del municipio. Son un centenar de kilómetros asfaltados en los que se han invertido más de 3,3 millones.
Agricultores y Ayuntamiento
El Plan de Mejoras de Caminos Rurales no es algo con punto y final, sino que “gracias a la permanente y buena comunicación entre agricultores y Ayuntamiento”, es algo “vivo”. Así lo apuntan responsables municipales, que señalan, por ejemplo, cómo los agricultores comunican periódicamente a los técnicos y controladores municipales las necesidades en el entorno de sus fincas.
El concejal responsable del área de Medio Ambiente y Agricultura, Esteban Rodríguez, reconoce cómo las reuniones con agricultores son habituales. “En ocasiones, nos reunimos en el área, otras, cuando así lo requieren los propios agricultores, lo hacemos en las fincas para ver ‘in situ’ las necesidades o los problemas que éstos puedan tener”. Para Rodríguez, la comunicación entre las dos partes es fundamental para cuidar un sector que, en Almería, da trabajo a 2.500 familias y es sustento de otras 10.000 cuyo trabajo depende directamente de la agricultura.
Almería, tierra de tomate
Una agricultura, la que se desarrolla bajo plástico en el término municipal, que casi en su totalidad se dedica a la producción y comercialización del tomate, recuerda Rodríguez, que señala también cómo el Ayuntamiento no pierde de vista, el hecho de que sea en el municipio donde están asentadas tres cooperativas tan importantes como son CASI, Vega Cañada y Caparrós. Las tres, ubicadas en La Cañada. También está Agrupalmería, en El Alquián.
Es precisamente en estas zonas de la capital donde más explotaciones agrícolas se concentran y “donde se cultiva un producto conocido a nivel nacional e internacional”.
Precisamente, el cuidado de este producto obliga a productores y comercializadores no sólo a primar la calidad en la producción, sino también en la presentación. Y ahí entra el Ayuntamiento que, con el acondicionamiento de los caminos rurales pretende que “los agricultores tengan unas vías de acceso adecuadas a las explotaciones y que no les causen pérdidas económicas”, asegura el alcalde de la ciudad. Luis Rogelio Rodríguez-Comendador destaca la “importante repercusión social y económica de las obras en la zona” y pone en valor las mejoras acometidas en los caminos “dado que benefician a gran número de familias dedicadas a la agricultura y a todos los vecinos en general”, dice.
Las mejoras se han acometido gracias a la colaboración entre agricultores y los doce técnicos del área municipal de Agricultura, y se han realizado en dos períodos. Entre 2003-2007 y entre 2007-2012. En la primera fase fueron 26 caminos, 40 kilómetros y 1,1
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