Empieza la entrevista dejando claro que intenta ser coherente con su discurso, por lo que ha cubierto la distancia entre Bilbao, donde reside, y Almería en tren y autobús.
En estos días en los que los ciudadanos sólo reciben malas noticias sobre la clase política hay que preguntar si es posible que un político sea coherente con su discurso.
Estamos viviendo una falta de confianza total en los políticos. Por eso, la coherencia es fundamental para que tu discurso sea creído. Por ejemplo, si yo apuesto por reducir el consumo de carne y de pescado, pues soy vegetariano. O si digo que es mejor comprar productos de temporada y que se produzcan en el entorno en el que vivo, pues no puedo comprar lo primero que vea en el supermercado. Evidentemente no es posible eliminar todas las contradicciones, pero es el objetivo que debe guiar la acción individual y colectiva de los movimientos sociales.
¿El sistema de partidos actual es el menos malo que puede haber o hay que cambiarlo de manera radical?
Se trata de una evolución, no de una revolución, y también de una devolución, en el sentido de que el poder ha de ser devuelto al ciudadano, que es el que debe tener el derecho a gestionarlo. Pero el ciudadano no puede esperar a que los políticos hagan ésto. Por eso es muy importante acciones como las iniciativas legislativas populares, a través de las cuales cientos de miles o millones de personas le están diciendo a los poderes políticos las medias que quieren que se tomen. Pero para eso el ciudadano debe se consciente del poder que tiene.
¿Qué es la ecología política?
En pocas palabras sería la justicia social y ambiental para hoy y el futuro, en el norte y en el sur del planeta.
Uno de sus principios o aspectos que más destaca es la prosperidad sin crecimiento. ¿Qué significa exactamente?
Significa que debemos lograr ser sociedades que vivan bien y felices dentro de los límites ecológicos del planeta. Eso sería la visión a largo plazo. Por eso decimos que el camino que ahora mismo estamos siguiendo en España, por ejemplo, está equivocado. Porque si todo el mundo viviera como en España necesitaríamos tres planetas para cubrir nuestras necesidades de consumo. Así que hay que cambiar el modelo productivo y de consumo de manera inmediata.
Y ahí es donde entra en juego el empleo verde. ¿Qué es?
En vez de producir bienes y servicios que atentan contra la naturaleza y contra el propio ser humano; debemos crear empleos que crean utilidad social, que estén adaptados a los recursos naturales que podemos tener en el planeta y en una zona concreta como es Almería.
Pon algunos ejemplos de empleo verde
Uno en el que la gente no suele pensar es la rehabilitación de viviendas. De esta forma, se pueden adaptar para que supongan un menor coste ecológico con un menor consumo de energía y podrán crear miles de trabajos para parados del sector de la construcción.
¿Es Almería un gran nicho de empleo verde?
Evidentemente. Hay muchas viviendas vacías o viejas que se pueden rehabilitar y es indiscutible su potencial en la producción de energías renovables.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/3/provincia/38639/florent-marcellesi-activista-ecologista-los-ciudadanos-tienen-mucho-mas-poder-del-que-creen-y-hay-que-ejercerlo-auto-auto