No ha sentado muy bien ni al Colegio de Médicos ni al Sindicato Médico que, desde la Consejería de Salud de la Junta los “descalifiquen” por denunciar situaciones que para ellos son rigurosamente ciertas y contrastables.
No obstante, no se han sorprendido ni unos ni otros. Nicasio Marín, presidente del Sindicato Médico ha afirmado que cuando la Junta dice que “las afirmaciones del Sindicato Médico y el Colegio de Médicos carecen de todo fundamento y no están basados en ningún dato contrastado o criterio objetivo” o que “con su actitud y sus afirmaciones sin fundamento, son ellos -los médicos- quienes contribuyen al desprestigio del sistema sanitario público” y que “se trata de una actitud lamentable”, lo que está haciendo “forma parte del estándar de descalificaciones a los que ya estamos acostumbrados cuando denunciamos la verdad”.
‘Enemigos’ Según él, “quien se atreva a criticar la gestión de la Consejería es un enemigo, al que primero se advierte y se llama fascista y cuyo cadáver se cuelga públicamente para que sirva de ejemplo” y denuncia que “hay muchos expedientes abiertos por eso y hay miedo”. Marín entiende que lo que el SAS debería hacer es “decir la verdad: que están ahorrando, en lugar de decir lo que han dicho y levantarnos una difamación”.
El Colegio de Médicos Por su parte, Francisco Martínez Amo, presidente del Colegio de Médicos de Almería, ha calificado las palabras de la Consejería como “una respuesta esperada de unos administradores que no admiten la crítica, pues son perfectos”, dijo con ironía.
Para él, que desde la Consejería “politicen” las declaraciones y críticas de los profesionales sanitarios “es patético”, pero, no obstante está “acostumbrado”. Comenta que cuando, como profesional, “dices algo, parece que los estás ofendiendo y se dedican a negar las evidencias porque aquí nadie es responsable de nada”, añade Martínez Amo.
Fármacos no iguales En lo referente a las “Equivalencias Terapéuticas de Fármacos”, los colectivos médicos insisten “en que la evidencia científica es la que es”, afirmó Nicasio Marín, en contra de lo afirmado por la Junta, que defiende que se dispense un mismo principio activo para determinadas indicaciones terapéuticas, como el cáncer de colon. Marín explica que “la Junta ha rebajado los equivalentes a la subasta; pero ir a la prescripción de equivalente de un fármaco es una devaluación, porque no son iguales”.
En el mismo sentido se ha reiterado Martínez Amo, quien considera que “ese tipo de cosas no debe decidirlas una Consejería”, porque lo está haciendo “cien por cien bajo criterios economicistas y no sanitarios”.
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