Representantes de 43 municipios firmaron ayer la renovación de los convenios con la Delegación de Educación de la Junta de Andalucía para financiar las escuelas infantiles municipales. Estos convenios afectan a 3.632 alumnos de entre cero y tres años que este curso acuden a uno de los 56 centros de este tipo.
La delegada de Educación, Isabel Arévalo, ha destacado el esfuerzo realizado por la Junta para ofrecer estas ayudas, pero, sobre todo, ha agradecido “el empeño de los alcaldes por mantener estos centros con los tiempos que corren” y en su opinión, esta actitud demuestra que “son alcaldes que trabajan por sus pueblos”.
Arévalo ha puesto de relieve la importancia que estas subvenciones tienen para las familias, máxime en estos momentos en los que muchos padres no se pueden permitir una plaza en una guardería privada.
Según el acuerdo de colaboración existente, mientras que Educación aporta una cantidad de dinero por alumno, el ayuntamiento pone el local y se hacer cargo del mantenimiento y la contratación del personal. Eso sí, hay consistorios que tienen cedida la gestión de la escuela infantil a una empresa que, con el dinero de la subvención, se encarga del personal y de las tareas de mantenimiento.
Precio por plaza
Según los datos ofrecidos por el jefe de servicio de Planificación, Gabriel Mori, la cuantía de cada plaza subvencionada es de 210 euros o de 278 con el servicio de comedor incluido. Sobre esta cantidad, la ayuda que se le da a las familias depende de la renta de éstas. Así, la subvención varia entre el 25% y el 100%, porcentaje que se establece tras cruzar los datos con las distintas administraciones.
Gabriel Mori ha explicado que, apesar de que el número de plazas y de centros que este año se incluyen en el convenio, la cuantía total que aporta Educación es mayor que la del año pasado, ya que, debido a la crisis económica es mayor el número de familias que pueden acogerse a una subvención más elevada.
Otro de los aspectos que Isabel Arévalo ha destacado es el hecho de que con estas ayudas, más el esfuerzo de los ayuntamientos, permite mantener a la población rural en su ámbito y, además, “supone ofrecer las mismas oportunidades a todos los almerienses independientemente del tamaño del pueblo donde vivan”.
En cuanto al reparto de las plazas, es muy variado, yendo, por ejemplo, de las 80 plazas para niños de 2 años en El Alquián, Adra o Vícar, a las 2 plazas para niños de cero años en Lúcar, Gádor o en Campohermoso.
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