El centro de la capital se tiñe de color ‘verde protesta’

24 de octubre. Seis en punto de la tarde. La Puerta Purchena de Almería empieza a llenarse de gente con pancartas, silbatos y banderas. Es la hora de la cita para mostrar de forma masiva el rechazo a los recortes en materia de Educación del Gobierno central y decir ‘no’ a Ley Wert, y que viene a significar “la desaparición del sistema educativo público”.

Con apenas diez minutos de retraso comenzaba la marcha verde en señal de protesta en la que profesores, docentes y alumnos de Almería gritan no a la reforma educativa. Sin duda, la participación en la manifestación ha sido alta, aunque lo más difícil es, como suele pasar en estos cosas, ponerse de acuerdo en el dato. Según agentes de la Policía Nacional, ayer se congregaron en torno a 3.000 personas, mientras que sindicatos como CCOO, UGT o CSIF cifran el seguimiento en más de 7.000.

La manifestación que partió desde Puerta Purchena y recorrió el Paseo de Almería hasta terminar en la Plaza de Las velas se produjo sin incidentes. Tan solo hubo un alto en el camino cuando los manifestantes se sentaron frente a la sede del Partido Popular para gritar: “No hay pan para tantos chorizos. Si somos el futuro por qué nos dan por culo”.

A pesar de que estaba previsto que la manifestación transcurriese ante las puertas de la Subdelegación del Gobierno para protestar contra los recortes, tan solo un grupo reducido realizó este recorrido sin producir ningún altercado.

Entre los miles de manifestantes que se dieron cita ayer en el centro de la ciudad se pudieron ver a familias enteras, rostros de niños, adolescentes, jóvenes y mayores, así como caras conocidas como las de los representantes sindicales de la provincia. Y es que se trata de la primera huelga de la Enseñanza en la que todos los sindicatos han mostrado su apoyo . “El ministro de Educación, José Ignacio Wert ha logrado el consenso contra la Lomce”, recordaban algunos.

Con la manifestación de ayer culmina una semana llena de movilizaciones en la que los estudiantes de Secundaria y ciclos formativos han secundado, en su mayoría, tres jornadas completas de protesta. Tras estas concentraciones, la comunidad educativa desea que cesen los recortes y se paralice la Lomce.

Más alumnos que profesores en el paro                                                                                                                                          Ocho de la mañana. Es hora de que los chicos entren a clase y los profesores vayan a trabajar a sus centros educativos. Pero ayer no era un día como los demás. Toda la comunidad educativa estaba llamada a hacer huelga en señal de protesta contra los recortes en Educación.

La puerta de entrada del IES Alhamilla, por ejemplo, distaba de su imagen habitual. No había jóvenes esperando a que abriesen las puertas y muchos de los docentes se tenían que volver a la sala de profesores porque ni uno de sus alumnos estaba en clase. Y es que prácticamente el 100% de los estudiantes de Bachillerato y el 80% de Secundaria hicieron huelga, mientras que solo un 15% del profesorado la secundó.

Así comenzó ayer la jornada de huelga convocada por todos los sindicatos, asociaciones de padres de alumnos y colectivos de estudiantes. Los sindicatos cifran el seguimiento global de la protesta en un 70%, en su mayoría estudiantes. Y es que según datos de CCOO, la adhesión a la huelga en Primaria fue del 40%, de un 90% en Secundaria y prácticamente el 100% en la Universidad, donde tan solo se impartieron un 5% de las clases. El seguimiento entre los docentes fue algo más bajo, un 39% en Infantil y Primaria, un 48% en Secundaria y “muy minoritario” en las facultades. Asimismo, los centros educativos privado-concertados se quedaron “al margen” de esta protesta.

A las doce de la mañana, más de 200 personas se concentraron ante las puertas de la Delegación  de Educación y durante una hora no dejaron de pedir al Gobierno central y a la Junta  que cambien las políticas de recortes y que se paralice la reforma educativa.

Allí, padres, profesores y alumnos volvieron a decir alto y claro ‘no’ a la Ley Wert. Y es que cada uno de ellos tiene sus razones para rechazar la nueva reforma.

Álvaro Valverde y Cristina Muñoz son estudiantes de Bachillerato que se concentraron ayer en Delegación. “Los recortes del Ministerio nos afectan a todos. Yo estuve a punto de quedarme sin beca este mismo año”, denuncia Valverde.

Estos estudiantes se encontraron en la concentración a madres como Azahara Lorenzo. “Tenemos muchas razones para protestar. La educación pública está para compensar las diferencias y así la están desmantelando”, explicaba. También había profesores como Pedro Castillo, quien se mostraba indignado ante el incumplimiento de las promesas del Gobierno. “Decían que no iban a hacer recortes”, ironizaba.