La Consejería de Educación, Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía, en colaboración con el Ayuntamiento de Cuevas del Almanzora (Almería), ha abierto al publico el yacimiento arqueológico de Villaricos tras la ejecución de diversas labores de acondicionamiento.
Entre los relevantes valores patrimoniales que ostenta la zona arqueológica de Villaricos, destaca la amplia secuencia cronológica que presenta el asentamiento, remontándose sus orígenes a la Edad del Cobre y permaneciendo habitado hasta época medieval, incluyendo un pequeño enclave visigodo. De gran interés son también las factorías de salazones de pescado y un área de necrópolis, que se pueden adscribir, casi en su totalidad, al período púnico.
El conjunto, según ha destacado la Junta, conforma un enclave de primer orden para el estudio y conocimiento tanto de las civilizaciones fenicias y púnicas, como de la romanización de la Bética, presentando un gran potencial para la investigación histórica a nivel andaluz y de la Península Ibérica. Está localizado en el margen izquierdo de la desembocadura del río Almanzora y fue excavado a principios del siglo XX por Luis Siret.
Se trata de un enclave muy complejo donde hay que distinguir diferentes núcleos. En primer lugar, se encuentra la antigua fundación fenicia y púnica ubicada en el sector Noreste ya que el asentamiento fenicio se halla en parte bajo el núcleo urbano actual de Villaricos. La ciudad romana que se extiende sin embargo desde el borde ruroccidental de las edificaciones precedentes en dirección al río Almanzora y es fundamental para explicar el proceso de romanización en la Bética.
El área de necrópolis localizada al norte de los asentamientos fenicios y púnicos tiene una amplia extensión espacial y cronológica dado que las tumbas más antiguas se remontan al siglo VII a.C. Son monumentales, hipogeos excavados en la roca. Los ricos ajuares documentados en ellas, principalmente datados entre los siglos V y III -a. C, muestran el periodo de apogeo que experimenta la ciudad en estos momentos.
Otra área claramente diferenciada es la zona industrial dedicada a la factoría de salazones de pescado, actividad muy importante y que se desarrollaba en el borde costero. Los estudios indican que estuvo en funcionamiento desde finales del siglo I hasta el siglo IV a.C.
Estas dos últimas zonas adquiridas por el Estado en los años 70 y transferidas posteriormente a la Junta de Andalucía conservan restos arqueológicos visibles que son objeto de visitas guiadas gracias a la colaboración del Ayuntamiento de Cuevas de Almanzora, comprometido en la conservación y promoción del patrimonio cultural de su municipio. Las visitas son guiadas y previamente concertadas.
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