“Me veo con fuerzas para seguir jugando en el Almería. Quiero ayudar desde el campo”

Seguramente sea el jugador más importante de la historia del fútbol almeriense y, por supuesto, de la UD Almería. Capitán durante muchas temporadas, ha jugado en todas las categorías, viviendo los asencos desde Tercera División a 2ª División B, después a Segunda División, y la soñada estancia en Primera.

¿A qué dedicas tu tiempo ahora?
Desde que dejé en Almería estoy con mi faceta de empresario. Hemos abierto dos tiendas de ropa de la marca Dolores Promesas, una en Almería y la otra en Málaga, y estoy volcado en ello con mi mujer. Y hago mucho deporte, ya que sigo entrenando por mi cuenta. Bicicleta, carrera, natación y, por consiguiente, triatlón. Me encuentro en muy buena forma. 

Te tengo que preguntar por la U.D. Almería. Supongo que sufriendo.
Estoy muy preocupado por la situación y sufriendo mucho con el deseo de que se acabe un 2015 fatídico a ver si el año nuevo trae alegrías a una afición que lo merece. Seguro que los futbolistas están deseando darle la vuelta a la situación y sacar esto adelante. 

¿Por qué no llegan demasiados jugadores almerienses a la élite? Aquí hay buena cantera.
Hay que darle más confianza a los chavales de la tierra. En mi época teníamos que practicar fútbol en campos de tierra y albero, y salían grandes compañeros. Ahora con las infraestructuras que tenemos deben salir muchos más, y me consta que hay jugadores almerienses que están destacando en categorías inferiores. Cuando bajamos a 3ª División, dentro de lo negativo que tiene un descenso, lo positivo es que se formó un grupo netamente almeriense con un ambiente tan bueno en el vestuario que hizo que ascendiéramos. 

¿Cuál es el compañero que más te ha impresionado en tu carrera?
Posiblemente Álvaro Negredo. Venía del filial del Madrid y aquí se hizo un gran goleador. También Diego Alves, Felipe Melo, Bruno Saltor, Carlos García... Sería injusto quedarme solo con uno.

¿Y como rival?
Imagínate el Barça de Guardiola, que lo ganó todo. Me tocó sufrir a Messi, Iniesta, Xavi... Te volvían loco en un palmo de terreno. Perseguías sus sombras (ríe).

Eras tan humilde que ni tenías patrocinador.
La verdad es que las marcas publicitarias mandaban cosas a mis compañeros, y yo nunca recibía nada. Una vez me mandaron unas botas y Diego Alves bromeó mucho. 

Estamos hablando de fútbol y te noto un brillo especial en los ojos. Tienes todavía esa espina clavada. Te gustaría seguir, ¿verdad?
Sí. El fútbol ha sido mi pasión y siempre intentaba reflejar en el campo el cariño que me daba la afición. Por supuesto que tengo esa espina. Me veo con fuerzas para seguir jugando.

Si te llaman, ¿volverías a jugar? 
Estando ahora mismo físicamente bien y con las ganas de un chaval, y con esa espina que tengo clavada, por supuesto que me gustaría volver a vestirme de corto y saltar al campo para ayudar a la UD Almería.

Ahora mismo todo lo que sea ayudar a que el club salga del bache. Imagino que el tema económico no será un problema...
Siempre les estaré agradecido. Gracias al Almería he podido formar una familia y un hogar. Y por supuesto, el dinero no será ningún problema, nunca lo ha sido y menos ahora.

Ojalá te llamen y puedas ayudar.
Es mi deseo. En la última etapa con Unai Emery, de revulsivo, saliendo los últimos minutos para aguantar el balón o provocar faltas... tuve la suerte de que todo salió bien con humildad y sacrificio. En los minutos que me den, lo pondré todo.

Me viene a la cabeza el gol al Xerez.
Sí, estábamos en una situación complicada después de Navidad, tras la salida de Hugo Sánchez y era un rival directo. Casi en el tiempo de descuento un rechace de una falta sacada por Cisma, enganché el balón y fue uno de los goles más importantes que marqué junto con el de la Ponferradina.

De nuevo veo ese brillo en tus ojos. Creo que con la situación del club y que toda ayuda es poca, lo que has dicho aquí, que estás a disposición de ellos, sería algo muy bonito para el equipo, para la afición y para ti.
Todo lo que acabas de decir sería un sueño. Es muy importante pertenecer a la LFP y el Almería tiene que mantenerse, eso es lo primero. La Segunda División es larga e igualada y ojalá se salga pronto de esta mala racha y el club esté donde se merece.