Desde el alcalde de Almería hasta el último exjugador apostaron por el equipo de Fran Fernández. Todos remaron en el entorno rojiblanco pero fallaron los profesionales.
Ha llegado la hora de los futbolistas. Es el tiempo de que hablen de una vez en el campo y de verlos desde el pitido inicial hacia la victoria.
Bastará que por una vez nos sintamos todos orgullosos de ver a un equipo valiente y osado dominando a su rival y enseñando los dientes. Diciendo al contrario que le va a ganar. Sin el ‘dodotis’.
No me vale una salida como la de Córdoba cuando se regaló una primera parte con un talante infame sabiendo que la victoria les daba la salvación.
Los profesionales del Almería saben que en esta tierra nunca pasa nada. Los futbolistas son amigos de los aficionados. Viven bien. Nunca pasa nada. Aquí no arde Troya por malos que sean los tiempos.
Si el partido que hicieron nuestros muchachos contra el Alcorcón se da en otro rincón de España igual esperan a los profesionales a la salida del campo y la pitada final a equipo y palco es de época.
Como en esta tierra nunca pasa nada y si pasa, el premio se lo reparten club y aficionados, porque a los futbolistas los rescatan sus representantes... eso, por una vez en 42 jornadas de Liga que salgan valientes y se dejen el ‘dodotis’ en el vestuario.
Por un Almería jugando sin pañales.
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