Un lateral que está cumpliendo a las mil maravillas en su primera temporada en el proyecto rojiblanco de Turki Al-Sheikh. Hablamos del catalán Iván Balliu, un jugador que aportó cosas muy positivas a la UD Almería hasta que la crisis mundial del coronavirus paró el mundo y también el fútbol.
El defensa, natural de Caldas de Malavella (Girona), ha repasado la actualidad del equipo rojiblanco de José María Gutiérrez, Guti, ahora que la Liga está a la vuelta de la esquina con el partido del domingo, 14 de junio, en el Carlos Belmonte ante el Albacete Balompié.
Espera, como sus compañeros, comenzar con tres puntos para afrontar a tope las otras diez jornadas de un campeonato que será nuevo para todos y en el que los rojiblancos se jugarán el ascenso a Primera en un menos y unos pocos días. Se le ve muy feliz en el Almería porque sabe que está en uno de los proyectos más ambiciosos de la categoría de plata del fútbol. El futbolista rojiblanco recuerda en primer lugar que la plantilla pasó por varias fases hasta entrenar ya todos juntos: “Se pasaron por todas las fases, la primera fue individual, más física donde no se podía trabajar mucho más, después estuvimos trabajando en grupos con balón, por lo que había más felicidad en los entrenamientos, más tarde con grupos de 14 jugadores y ahora todos juntos”.
En forma
Iván Balliu está OK para competir porque hizo los deberes durante los dos meses de confinamiento por la crisis mundial del coronavirus: “No he parado de trabajar en casa desde que se detuvo la competición, cumpliendo con la tarea que nos mandaban, aunque está claro que a nivel físico igual lo notamos en los primeros partidos de los once que nos quedan por jugar, pero tenemos una plantilla joven, y eso es una suerte y seguro que en un par de partidos tendremos ya el ritmo para competir para intentar lograr el objetivo del ascenso a Primera. Además, se están trabajando bien los temas físicos, velocidad, potencia... solo debemos encontrar esas sensaciones”, dice.
Futuro
La Liga exprés será apasionante y al mismo tiempo una incertidumbre: “Con partidos cada 72 horas se necesitan jugadores frescos, gente con esa mentalidad de ganar cada partido, con hambre y esta plantilla tiene mucha hambre, por lo que estoy seguro que llegaremos al objetivo que todos queremos”.
Once partidos, once finales: “Tenemos un calendario bonito, con ese partido en Zaragoza. Tuvimos esa mala racha de seis partidos sin ganar, pero luego ganamos al Deportivo con buenas sensaciones, pero eso ya no cuenta”.
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