Joan Francesc Ferrer Sicilia, Rubi, dice que se quedaría "sin dormir" si hace falta para que la UD Almería consiga el Play Off y obtenga billete hacia la máxima categoría. Con partidos como el de Cartagonova va a ser imposible, con fallos graves, inseguridad con la pelota, juego previsible y un marcador que hace saltar las alarmas aún más, ya que nadie hasta la fecha le había hecho tres goles en el presente campeonato. El catalán reconoció en rueda de prensa que mandar tantos balones a Makaridze tiene sus riesgos y así llegó el penalti del georgiano: "Con el Oviedo contamos más de 20 cesiones al portero y eso no podía ser. Ante Tenerife y Albacete mejoramos, pero de nuevo regresamos a lo mismo. Querían asegurar y tanto va el cántaro a la fuente que se rompe. Hemos llamado a la puerta para que nos pasara algo así. No son consignas del entrenador. Quiero jugar al fútbol, no ser un equipo con miedo en el cuerpo y que le enviemos siempre los balones al portero y ver qué pasa".
Demasiado fácil
Todo salió mal contra el Cartagena. Los jugadores no supieron leer la situación de partido a la vuelta de vestuarios y conceder tres goles fuera de casa es sinónimo de derrota. Rubi sigue hablando de falta de experiencia y madurez cuando aprieta la situación y también ansiedad: "No hemos hecho una mala primera parte, pero sí faltó profundidad. Le dimos un golpe moral al Cartagena con el 1-1 y resulta que en un minuto concedemos otro gol de una facilidad tremenda. No es un tema de que no quieran o no tengan ganas, sino que hay momentos en los que nos puede la ansiedad".
La afición
Mandó un mensaje a los aficionados, que esperaban un final de Liga mucho más esperanzador, peleando por la segunda plaza. De esto se pasó a amarrar la tercera plaza e incluso la promoción. Momentos muy delicados para Rubi y la familia rojiblanca: "Vamos a pelear por el Play Off y por el ascenso, que no haya dudas. Cometemos fallos que no son por falta de voluntad y reconocemos que cometemos errores. Pedimos a la afición que nos dé un voto de confianza. Me parece una vergüenza que no podamos contar con nuestra gente en el Mediterráneo".
Sangría de tantos
El grifo de goles en contra continúa goteando y aunque el técnico señala que ahora conceden menos a los rivales, lo que no cambia es la facilidad con la que marcan. "Es evidente. Estamos consiguiendo que nos lleguen y nos tiren menos a puerta, pero igualmente son suficientes para que nos marquen. Nosotros incluso nos quedaremos sin dormir para clasificarnos en el Play Off. También arriba podemos ser más contundentes".
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