Si en el partido frente a la Real las conclusiones positivas por parte de los hombres de Rubi fueron escasas, sólo se salvó de la quema Robertone, el duelo de ayer ante un Atlético de Madrid que no está en su mejor momento si deparó buenas noticias para el equipo, para la entidad y para la afición.
Volvía al once inicial Samú después de varios meses de ausencia y el equipo lo notó positivamente. Actuando como pivote por delante de la defensa fue un secante para los ataque visitantes, ocupó un gran espacio en el terreno de juego haciendo una demostración de poderío y sacó la pelota con criterio. Fue tal su nivel que Rubi lo mantuvo durante los noventa minutos, pese a llevar mucho tiempo sin jugar tanto de forma continuada. La vuelta del portugués en forma es un gran regalo de Reyes para el equipo.
Luis Suárez, que había sido titular en un puesto que no es el suyo en el estreno del 2023, mostró destellos de lo mucho que puede aportar al equipo porque todas las veces que intervino culminó sus acciones con acierto. El Almería tiene dos delanteros diferentes y en mi opinión complementarios, aunque puedo estar equivocado. Arnau estuvo pletórico en los diez minutos que actuó.
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