Matemáticamente en Segunda División

LA OPINIÓN: El fútbol no son matemáticas y por ello hay que seguir luchando sin mirar la clasificación. Pero uno cae en la tentación de ir los estudios primarios y recordar aquella regla de tres que nos enseñó don Miguel López Ortega en quinto curso del Colegio Virgen del Mar de la calle de Granada. Como diría don Miguel, si de 26 partidos has ganado 7, de 12 vas a ganar X y no llegamos ni a la mitad de lo que necesitamos por muchos decimales que le apliquemos. No queda otra, hay que dejar la calculadora y coger el rosario como tantas veces: pero el de la aurora.

No me salen las cuentas porque los equipos de la cola se han reforzado muy bien y están vivos y con chispa con plantillas más expertas y con futbolistas que saben sufrir en puestos de descenso, algo que no tenemos en Almería.

Disfrutando

Uno tiene la sensación de haber asistido a una Liga del Almería (con parón incluido) que lo ha fiado todo al mensaje de su consejero delegado en el sentido de “no vamos a volver a Segunda”. Y se quedó tan pancho y los jugadores se lo han creído.

Rubi con solo dos jornadas en descenso en el tramo inicial hizo sus cuentas y se esperaba lo mejor en la segunda vuelta y se la ha pegado con unos marcadores concluyentes. Somos el peor equipo de la segunda vuelta.

Repitiendo

Lo peor de este Almería de hoy es que no ha sabido corregir los fallos y se ha ido cayendo sin parar hasta meterse en un lío a base de entrenamientos a puerta cerrada que nada esconden al rival.

Ha dicho Rubi hasta la saciedad esa manida frase de “de los errores se aprende”, serán otros, porque el Almería ha sido frágil en defensa desde la primera jornada y no lo ha reparado.

Solución

Al entrenador no lo va a echar ni su presidente ni su CEO porque por encima de todos están los resultados que son los que mandan en los clubes. Lo verdaderos jefes.

O llega una reacción exprés del Almería en forma de puntos o el entrenador será despedido por buena que sea la imagen ya que los dirigentes agotaron su paciencia con tantos fallos.

No salen las cuentas en esta regla de tres que nos lleva a Segunda. 

Los números no dan para más.