El efecto Garitano

Aprovechaba la previa del partido frente al Girona para dar las gracias a Garitano por haber acertado el reto de venir al Almería porque estimaba que el desafío de salvar al cuadro almeriense era harto difícil y complicado.

El comienzo del duelo del pasado domingo invitaba a pensar que pese al poco tiempo que había tenido el técnico vasco para trabajar con sus pupilos éstos llegaba al partido con la lección bien aprendida. Bloque medio alto para defender, robar y salir como balas hacia la meta contraria.

La clave Los almerienses anularon al cuadro local que no sabía por donde le llegaban las oleadas de los nuestros. Pronto este aplastante control del juego por parte indálica se reflejó en el marcador con una asistencia de lujo de Robertone a Baptistao.

El Almería que llevaba el temor a la grada de Montilivi. Sin meterse en su área los de Garitano controlaban las acciones ofensivas locales que sólo a balón parado conseguían sembrar peligro. Incluso la pareja Embarba-Baptistao fabricó un segundo tanto que ponía en franquicia el duelo.

El partido

Poco a poco el Girona se creció y el Almería se encogió y en algo más de seis minutos dio la vuelta al marcador tras un festival de errores defensivos de los nuestros, los de siempre. El efecto Garitano que sólo había durado poco menos de media hora dejó paso al Almería de esta temporada que se presenta a la pelea con el inconveniente de tener una mandíbula de cristal incapaz de encajar los golpes del adversario que no tarde en dejarlo tumbado sobre el césped.

Garitano muestra su condición de bendito cuando apunta en la rueda de prensa posterior al partido que toca trabajar para mejorar.

Si lo consigue habría que levantarle un monumento en el Power porque lograr la salvación sería un hazaña infinitamente más meritoria que todos los ascensos precedentes; sencillamente por los mimbres que la dirección deportiva ha puesto a su servicio.

Los números del Almería son propios de una película de terror futbolera con 29 goles recibidos en diez partidos en Primera División.