Pasaban las 13:00 horas del miércoles, 11 de octubre de 2023, cuando Mohamed El Assy presentaba a Gaizka Garitano como nuevo entrenador de la UD Almería. Aquella misma tarde el director general y consejero delegado se dirigió a la afición con contundencia: “No vamos a descender”. Para muchos una frase con demasiado peso yendo último el equipo; y para otros una declaración optimista que debe salir siempre de una junta directiva por delicada que sea la situación.
Desde entonces han pasado casi 100 días y no hay ni una sola palabra que haya trascendido hacia la afición por parte de la cúpula rojiblanca. Es la misma que llevó a este club a Primera División, la que encontró a Darwin Núñez, Umar Sadiq y El Bilal Touré, entre otros, pero como en el fútbol dos más dos no siempre suman cuatro, este año ha tocado equivocarse con el mayor desembolso de la historia con 52 millones de euros. Esto entra dentro del juego, y con el Almería último a once puntos de la permanencia no estaría mal que El Assy bajara la pelota al suelo y ofreciera su versión sobre lo que viene ocurriendo en estos meses.
Confusión
Porque el silencio contribuye a la confusión, a no saber qué rumbo va a tomar el Almería la temporada que viene independientemente de la categoría, porque si bien a Mohamed nadie le obliga a salir en rueda de prensa, sí tiene la gran oportunidad de transmitir esa calma que necesita una provincia, porque tener un equipo en lo más alto es positivo a todos los niveles más allá del deportivo.
Quizá ya no haga falta decir que van a venir uno, dos, o treinta fichajes en enero, sino poner encima de la mesa qué rumbo va a tomar el club si hay un descenso. En el momento que los hombres fuertes de Turki Al-Sheikh se dirijan a sus abonados, aficionados en general que hayan pagado un abono o sigan los partidos de desde casa, y les informen de que el Almería aprenderá de sus errores y si baja hará un proyecto ambicioso para intentar retornar a Primera, se habrá acabado todo tipo de especulación, rumor, incertidumbre y tensión alrededor de la entidad.
Margen
Por esfuerzo en fichar bien no habrá sido, porque se agotó el margen salarial en verano con unos fichajes muy celebrados por -casi- todos, que después en el terreno de juego no han ofrecido lo que se esperaba de ellos. Almería conoce a El Assy y Gonçalves en la victoria y en la derrota prefieren guardar silencio, de momento, mientras buscan soluciones. Llegados a este punto, ilusionaría más que el Almería anunciara que Turki no se rinde y va a hacer una buena plantilla en Primera o Segunda División el año que viene que sacar el nombre de un fichaje de invierno.
Esta temporada ha pillado a todos con el pie cambiado y nada como una declaración desde las altas esferas para defender el honor y el orgullo del Almería y volver todos al mismo barco. La afición necesita escuchar a El Assy, conocer qué rumbo tomará esta nave. Solo él tiene la potestad de acabar con cualquier especulación o rumores.
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