LA OPINIÓN DEL DÍA: Con el tiempo todo se sabe dentro de lo poco que se filtra por los juros de Palacio. Desde que Turki Al-Sheikh dijo que Vicente Moreno se sentara en el banquillo del Almería y aquello no salió bien: apostó por Rubi. Les dijo a Mohamed y a Joâo que buscaran al catalán allá donde estuviera y lo firmaran. La primera opción tras el despido de Moreno era Rubi pero el catalán no estaba por la labor de volver tan pronto y les pidió tiempo. Luego cuando despidieron a Garitano saltó de nuevo el nombre de Rubi pero estaba decidido un regreso con el equipo ya descendido para repetir ascenso y permanencia. Porque los números de Rubi no se pueden cuestionar en Palacio donde no se sabe de suerte y rebotes para alcanzar la meta. Encima de la mesa del presidente del Almería hay un ascenso a Primera y una permanencia. No se contempla si falló el Eibar o si el equipo pasó minutos en Segunda en Cornellá-El Prats. Turki lo pidió en octubre pero...
Han salido nombres de entrenadores que no van a venir y la dirección deportiva siegue con su lista de candidatos al margen de lo que decida el presidente pero al final lo que llega es lo que dice Turki Al-Sheikh y nunca lo ha dudado: prefiere a Rubi para el banquillo y le dará toda su confianza para que repita lo éxitos de su anterior etapa. Todos los riesgos de esta operación corren a cargo del ministro de Arabia. Rubi era la salvación para Turki.
El primero
Cuando la operación Vicente Moreno terminaba en la séptima jornada de LaLiga empezaron a brotar nombres de entrenadores. Bruno Saltor, como los Pacheta, Paco Jémez y Eder Sarabia aparecían mientras que Joâo Gonçalves se reía en su despacho sabiendo que Turki ya había dados las instrucciones pertinentes. No hubo otro nombre en Arabia y el tiempo que pidió el catalán Turki se lo ha dado para que vuelva a la que considera su casa y repita los éxitos pasados. En la mente del presidente del Almería nunca hubo otro entrenador para la causa y toda la responsabilidad caerá sobre Rubi para devolver el brillo y la gloria al club.
Espera
Las ideas del entrenador catalán no son las mismas que las de Turki porque se ha ganado un lugar en la élite de España y no le faltará trabajo en Primera pero su relación con el ministro y sus hombres fuertes obliga a un esfuerzo especial para dirigir al Almería. Sabe bien el catalán a lo que se expone porque en fútbol nada te garantiza repetir éxitos pasados pero decir NO a Turki no es tarea fácil y para terminar de convencerlo están El Assy u Gonçalves que piensan igual que su presidente. No hay tanta prisa porque la plantilla está lista y la decisión ha sido tomada en Palacio.
Competencias
El caso de Rubi como entrenador del Almería ha sido especial en muchos aspectos porque se le daba opción de pedir jugadores y se le consultaban fichajes. Nunca el Almería entregará todo el poder a su técnico pero con el catalán todo ha sido especial y parece que ese poder de decisión irá en aumento a la hora de confeccionar la nueva plantilla. Nadie sabe el número de salidas ni de llegadas pero todo apunta a que se harán con el visto bueno del máximo responsable del vestuario. Lo que pasó con Moreno le toca repararlo a Rubi.
Rubi era la salvación. Turki lo pidió en octubre.
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