La emoción de un ex del Almería: “Lo pasé muy mal”

Dos temporadas en la UD Almería dan para mucho y Francisco Portillo disfrutó del éxito vestido de rojiblanco. Porque cuando llegó al Mediterráneo en 2021 tenía una misión: ascender. Y lo consiguió. Era el tercero de su exitosa carrera deportiva, ya que antes lo había logrado en el Real Betis (2015), y Getafe (2017). Pero su carrera dio un giro cuando terminó su contrato una vez salvó la Primera División. El Almería no le renovó y quedó a la espera de conocer su futuro.

Los meses de verano avanzaban y Portillo (33 años), continuaba haciendo entrenamientos en solitario. Hasta que en septiembre de 2023 Txema Indias, director deportivo del CD Leganés, decidió firmarlo para un proyecto deportivo que ha terminado también en lo más alto. El técnico, Borja Jiménez, le ha dado los mismos galones que Rubi hace dos campañas y ha manejado el centro del campo a su antojo. 

El día soñado

Acompañado por su familia, el Leganés se impuso 2-0 al Elche y celebraba no solo el ascenso sino también el título de campeón de Segunda. En definitiva, en el mismo lugar donde vestido de rojiblanco conseguía esos éxitos, repetía con otra elástica. El momento más emotivo lo firmó el malagueño cuando fue entrevistado para la televisión con derechos de LaLiga: "Lo pasé muy mal en el verano, mi familia lo sabe, no tengo palabras. Soy un privilegiado por vivir estos momentos. Estoy agradecido a este club, me dio la oportunidad de volver a sentirme importante".

Jugador clave

Ese sufrimiento valió la pena, porque llegó en la octava jornada de competición y rápidamente se hizo con la titularidad. Es el hombre de los ascensos (cuatro en su carrera deportiva), y quiso agradecer al Leganés que le abriese las puertas. En verano de 2023 cerraba su periplo en el Almería y ahora es uno de los ídolos de Butarque. Desde aquel 21 de septiembre, fecha de su presentación, la historia no ha podido tener un mejor guion y el jugador espera seguir defendiendo al Leganés en Primera.

No se le pasa por la cabeza la retirada y en el Almería le recuerdan como uno de los héroes del ascenso, así como de la permanencia en Primera asumiendo un rol más secundario en la plantilla de Rubi, que curiosamente va a volver por el Mediterráneo.