EL ANÁLISIS: Nunca he tenido claro si la afición puede ganar un partido pero creo que no lo pierde, porque ayuda y anima a ser mejores a los profesionales. Esta temporada Segunda es de locos con 18 equipos que han sido de Primera y una pasión por ver fútbol que ha desbordado a la mayoría de clubes. El Almería ha tenido que cerrar la campaña de abonados con la misma cifra de la pasada Liga mientras hinchadas como las de Deportivo, Real Zaragoza, Real Oviedo, Sporting o Málaga tienen largas listas de espera hasta que se puedan ampliar sus estadios, que ya son grandes para la segunda categoría de España. Hasta cinco equipos han superado la barrera de los 20.000 abonados, cifras que no son normales en Segunda.
Por muchas televisiones y plataformas que ofrezcan los partidos, el ir al Estadio no se ha perdido por suerte y la prueba la tenemos en Almería donde hemos pasado de sacar el abono en función de la categoría a tenerlo por sentimiento rojiblanco. Los compromisos del Mediterráneo van a ser muy concurridos pero lejos del ambiente que le espera al Almería en campos como Riazor, La Romareda, Carlos Tartiere, El Molinón o La Rosaleda. Tener muchos abonados no te garantiza subir a Primera ni competir en esta categoría. Getafe, Rayo Vallecano o Girona no llegan a estas cifras.
Historia
Siempre se ha dicho que los años pesan cuando se habla de determinados clubes. El Almería, que data de 1989 como Club de Fútbol, no está para dar lecciones de historia pero ha sabido crecer en la medida que ha contado con un poder económico desconocido hasta la llegada de Turki Al-Sheikh. Se ha pasado en esta provincia del abono por categoría al abono por sentimiento rojiblanco. Ha sido una constante desde la noche de los tiempos que si subía el equipo a Primera faltaba campo y si bajaba el cemento se comía los partidos. En otras ciudades como las anteriormente citadas la media de abonados en Primera y Segunda siempre ha sido similar mientras el Almería empieza ahora.
Tradición
No se había dado antes un número tan elevado de clubes con pasado en Primera compitiendo en Segunda y se está notando. El ascenso se ha puesto muy caro y si LaLiga la ganan las aficiones el Almería sería de la mitad de la tabla y el Deportivo de Fernando Soriano el campeón al tener más de 25.000 abonados. Los dos de Asturias siempre han dado la talla en la grada y tanto La Romareda como La Rosaleda han vivido muchas temporadas en Primera y sus aficionados son el ejemplo del amor a unos colores. Los abonos en estas ciudades se venden solos y la afición es fiel y duradera para desahogo de los dirigentes a la hora de nivelar el presupuesto.
Emergentes
Esta temporada LaLiga puede presumir de número de abonados en sus dos grandes competiciones. No se había visto nada igual y a los habituales que pulverizan los registros de abonados se unen los clubes emergentes (como el Almería) que han crecido y luego consolidado su modelo para llamar la atención de los rivales y de la propia provincia por las cifras que se ofrecen. Nada te garantiza un ascenso porque se decide en el campo pero las entidades son más grandes en la medida que sus aficiones dan un paso al frente. Al fútbol se va para divertirse y esta temporada puede haber tanto espectáculo en Segunda como en Primera y la media de aficionados se ha disparado gracias a la presencia de 18 clubes que han sido de oro.
Que Javier Tebas ‘amplíe’ la Primera División.
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