Pepe Cortés: del Plus Ultra hasta la muerte

El amor a unos colores por encima de todo

Pepe Cortés en la Ciudad Deportiva de Los Ángeles con su Plus Ultra.
Pepe Cortés en la Ciudad Deportiva de Los Ángeles con su Plus Ultra. Rafa Góngora
Tony Fernández
19:27 • 07 dic. 2024

El pasado domingo se dejaba ver por la Ciudad Deportiva de Los Ángeles uno de los presidentes más carismáticos del fútbol almeriense. José Sánchez Cortés iba con el equipo senior del Plus Ultra para medirse a la Peña Deportiva de Garrucha. Allí estaba haciendo de todo: sacando niños y hombres de la calle para que el fútbol le devuelva la alegría. Serio, triste y gastado de tanto luchar contra los elementos sigue al pie del cañón porque los del Barrio de Los Ángeles lo llevan en su ADN. Pepe Cortés ya no reina en Las Chocillas pero quedará para la historia como el último de sus ermitaños. Del Plus Ultra hasta la muerte porque el amor a unos colores lo lleva a gala un hombre del balompié que nunca pasa inadvertido. Ha luchado y seguirá haciéndolo para que el fútbol cambie y vuelva a ser lo que él conoció en su juventud. Él salía de la cantera y a ella le ha devuelto con generosidad todo lo que le dio. Junto a su hermano Antonio revitalizaron un club que se moría y se topó con todas las adversidades, pero no han podido hundirle.



Dice Pepe Cortés que si habla y dice todo lo que piensa “me meten en la cárcel” porque es de verbo fácil y no tiene miramiento con aquellos que le hacen daño al deporte y a la formación del jugador. Su idea es sacar a jóvenes de la calle y meterlos en el deporte. Cuando él empezaba el fútbol le abrió muchas puertas y pasando por jugador, entrenador y presidente. Poco le queda que aprender y mucho que enseñar a la hora de gestionar un club.



Persona



La familia Sánchez Cortés llegaba al Barrio de Los Ángeles a finales de los años sesenta. Antonio y Pepe no tardaron en implicarse en la vida del barrio. Uno como maestro y el otro como futbolista antes de que llegara el mundo de los negocios con la refrigeración. Antonio puso una academia para dar clases particulares en los bajos de la Torre 1 de los pisos de Terriza y a Pepe había que buscarlo por el campo de La Balsa jugando y enseñando a niños. El fútbol era la pasión de dos hermanos tan unidos que no tardaron en trabajar para fundar el equipo de Los Ángeles con Pepe Giménez como capitán del barco y Juan Rojas como asesor en la sombra. 



Jugador



Antonio entrenaba y gestionaba, y Pepe jugaba de centrocampista. Duró poco en el barrio, ya que era bueno y fuerte y pillaba mucho campo. Saltó por diferentes equipos de la provincia y se marchó a la aventura por clubes de la Región de Murcia y Valencia. Llegó a competir contra el Almería defendiendo la camiseta amarilla del Orihuela en el Franco Navarro en uno de los partidos más emotivos de su vida. Eran equipos de la Tercera División. Pepe Cortés no se andaba por las ramas y al primer mes que no le pagaban lo pactado salía volando y dejaba al club. Su palabra era un contrato y el que no cumplía con lo pactado ya sabía lo que le esperaba. Su temperamento le hizo salir antes de tiempo de conjuntos que luego triunfaron.



Entrenador



Se sacó la titulación de entrenador y se puso a dirigir equipos pero lo de no cumplir era una constante para futbolistas y técnicos y por ello no pasaba Pepe Cortés. En la recta final de Antonio Garrido como presidente del Plus Ultra le echó una mano cuando la economía se lo permitía y el Plus Ultra levantó cabeza pero el campo de Las Chocillas estaba sentenciado de muerte. Antonio murió y con su hermano tomaron las riendas del club y le dieron vida haciendo una importante inversión en la reparación del campo y poniendo por primera vez en su historia césped en el mítico campo. Las deudas llegaron, la Federación no tramitó las fichas y el Plus Ultra no salió.


Presidente

Cuando los hermanos Sánchez Cortés se quedaron solos en el Plus Ultra cambiaron las tornas y el gestor, que era Antonio, le cedía los trastos a Pepe y nacía un sillón en el fútbol almeriense a modo de ciclón. Por su despacho de Las Chocillas pasaban futbolistas y entrenadores. Se movía bien a nivel de Federación pero lo que a comienzos de siglo iba viento en popa (presidente desde 1999), se truncó por la amenaza de las obras que pillaban de lleno a la joya de la corona del club: el campo de Las Chocillas. Luchó por igual en administraciones y federaciones pero no pudo evitar la caída del club de su vida. Han pasado muchos años y no se rinde como el último ermitaño de un campo mítico y el presidente de una entidad que se resiste a morir pese a que no saque equipo a nivel federativo. Porque Pepe Cortés es del Plus Ultra hasta la muerte.


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