La tradicional comida de Navidad celebrada en El Toyo ha dado para mucho, ya que se sentaron a la mesa el Ayuntamiento, los jefes del Almería y su fundador. Lo apuesta todo el club a un nuevo año donde se pueden alcanzar logros y anhelos de toda la vida. Por orden debe ser lo primero el ascenso a Primera. Lo segundo las obras de la Fase 2 del Mediterráneo y la puesta en marcha de la Academia que es la gran obra para recordar a Turki Al-Sheikh por los siglos. Hablaron de ello la alcaldesa María del Mar Vázquez con Mohamed El Assy, así como con Guillermo Blanes con Joâo Gonçalves. Van a por todas como los futbolistas para que el año que viene sea recordado para siempre. En El Toyo con miles de metros cuadrados propiedad del presidente del Almería la cara del fundador, Guillermo Blanes, era el reflejo de la ilusión de aquel que presentó tres veces una tierra prometida que sigue sin llegar.
Una fábrica de jugadores para un equipo de Primera División y un campo de fútbol que haga recordar aquellas tardes de gloria en el Juan Rojas cuando olía a césped. El tiempo pasa y aquel que daba vida al Almería, Guillermo Blanes, sueña con una Ciudad Deportiva que a él no le dieron para un Almería que apunta a Primera. Tener a los niños en una Academia es tan importante para el fundador que no parará hasta hacerla realidad. Emprendedor imparable sabe que con Turki va a llegar la gran obra para ser recordado por siempre. La obra para la eternidad del presidente será la Academia.
Ascenso
“Vamos a subir a Primera, tendremos las obras de la Fase 2 y la Academia para recordar a Turki por los siglos”, son los sueños del fundador del Almería que tenemos, un Guillermo Blanes al que le brillan los ojos cuando habla de tener una Ciudad Deportiva para la cantera. Pero antes es de los convencidos en el ascenso del Almería a Primera “porque el equipo está unido y esa es la clave del éxito en el fútbol”. Se muestra agradecido con los actuales dirigentes rojiblancos que le tienen a su lado y le consultan por su experiencia. Blanes es de los convencidos y está disfrutando como nunca viendo competir al equipo de su vida. Para completar su obra deportiva a Blanes le falta una Academia de fútbol y un ascenso que cataloga como el definitivo para ir a Europa.
Obras
Con la alcaldesa de la ciudad y el director general del Almería sentados a la mesa no se puede evitar hablar de las obras en el Mediterráneo. De esa documentación de la que se viene comentando para meter la pala y afrontar la Fase 2. Hay un plazo establecido y el ascenso lo cambia todo. No se puede demorar en el tiempo porque la afición está creciendo y la juventud se ha abonado al Almería. No importa el orden de los factores porque el presidente tiene dinero para las dos grandes aventuras que harán eterno al ministro de Arabia Saudí. La alcaldesa encantada con un campo de fútbol nuevo y una casa para la cantera almeriense. No se puede pedir más para una ciudad que se ha ilusionado con el fútbol con los jóvenes tirando de los mayores camino del Mediterráneo.
Academia
No puede faltar en cada encuentro entre Ayuntamiento y Almería hablar de la tierra prometida, de esa casa para la cantera qu desde 1980 ronda por la cabeza de Guillermo Blanes. El Almería nació para darle oportunidades a los futbolistas de la tierra y no tardó en presentar el proyecto de la Ciudad Deportiva un Guillermo Blanes que cree en la juventud y en los futbolistas almerienses. No la pudo hacer en su etapa de presidente y tiene claro que Turki “va a pasar a la historia por darle a la ciudad la obra más importante para el Almería”. Los tiempos han cambiado y en la cantera del Almería hay futbolistas de toda España y de otros países. Hoy repartidos por los campos de la capital, se necesita una casa para que el club pueda competir de igual con los grandes de España.
Almería quiere obras para la eternidad.
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