En una emotiva entrevista en De Viernes, Isa Pi, la hija de Isabel Pantoja, compartió recuerdos dolorosos de su infancia y adolescencia. En su relato, destacó que creció en un hogar donde nunca se sintió querida. Ana Rosa Quintana y Xavier Sardà, presentes durante la entrevista, expresaron críticas hacia la cantante. Ana Rosa señaló: "¿Cómo se puede hacer esto con una criatura que ya ha tenido la desgracia de estar en un orfanato?".
En este contexto, se mencionó un episodio perturbador sobre la atención médica que recibió Isa. A los 16 años, fue llevada por su hermano Kiko a un ginecólogo para que certificara si había perdido o no la virginidad. Este tema hizo estallar a algunas colaboradoras del plató como Marina Rivers: "Lo fuerte son los acontecimientos machistas por lo de ser virgen y llevarle a un médico y que ese médico acceda a esto. Tenían que perseguirlo, encontrarle y que deje de ejercer".
La presentadora fue contundente al comentar sobre el testimonio de Isa. "¿Cómo no se puede cuidar, amar y proteger a una niña que ha adoptado? Creo que son de las peores cosas que he visto hacer. Lo que te da seguridad en la vida es haber sido querido de pequeño. Cuando la única persona que tienes, que es tu madre, no te quiere, es un dolor". Ana Rosa, visiblemente afectada, añadió: "Se te parte el alma. No puedo ni verlo, me pongo mala".
Su indignación se centró en Isabel Pantoja, a quien le pidió que cesara el sufrimiento de su hija: "Por favor, señora. Que tiene una hija. Que tiene un nieto. Vale ya de hacer sufrir a esta criatura que no ha hecho nada" . Ana Rosa ofreció palabras de aliento a Isa: "Se ha roto y necesita curar las heridas con gente especializada que le ayude a superar este dolor. Aquí estaremos todos para cuidarla y darle mucho cariño".
Durante la entrevista, Isa no dudó en cargar contra su madre. "Me adoptó para abandonarme, como a un perro", expresó con tristeza. Recordó cómo su madre llegó al orfanato y eligió llevarla a casa: "Dulce me contó que yo tenía el pelo muy corto y que tenía calvas en la cabeza, y eso que yo tengo buen pelo. Mi madre se paseó entre las cunas, me vio". y dijo 'Quiero esa. Esa se viene conmigo'. Por eso sé que me quiso desde el primer momento". Isa reveló que no supo que era adoptada hasta los 7 u 8 años, cuando una compañera de colegio se lo mencionó.
Isa Pi notó diferencias en el trato familiar solo dos años después de su adopción. Su tío dejó de hablarle durante nueve meses, lo que la afectó profundamente: "Una madre protege a sus hijos. Ella me quiere, pero no ha sabido protegerme", lamentó. Isa también sintió que su tío Agustín y su abuela Ana la trataban de manera diferente a su hermano Kiko: "No me sentí querida porque no era hija biológica. Ellos no estaban preparados para que entrara en casa una niña adoptada".
Xavier Sardà aportó una perspectiva dura al debate sobre el abandono. Afirmó que algunas adopciones son impulsivas y temporales, lo que puede llevar a consecuencias devastadoras para los niños: "Adoptar no es un capricho, y aquí es como si se tratase de un animal", aseguró el periodista sobre el caso de Isa Pantoja.
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