Robe Iniesta ha visto pasar ante sus escenarios a miles de personas de varias generaciones, pero queda Robe para rato. Este sábado (21.30 horas) será el protagonista de un esperado concierto en Almería.
¿Qué podrán ver el sábado los almerienses que vayan al concierto?
Es una continuación de la gira anterior, en la que estamos presentando ‘Mayeútica’, el último disco. Se encontrarán también canciones de los otros dos discos de Robe, canciones de Extremoduro de siempre y también alguna cosita nueva.
Hace algo menos de un año preparabas una gira con muchas incógnitas sobre la mesa por culpa de la pandemia. ¿Ahora ya es todo más tranquilo? ¿Son los conciertos de siempre?
En el aspecto de fiesta son los conciertos de siempre, con la gente desmadrándose y con falta de preocupación. No tiene nada que ver con el año pasado. Ahí había que salvar los muebles y adaptarse.
Tras la pandemia, ¿es verdad aquello que decíamos de que íbamos a salir mejores? ¿Hemos salido mejores o todo lo contrario?
Es cuestión de cada uno, quizás. Nos tiene que valer para haber visto cosas a todos, en conjunto. Nos llevaban avisando mucho tiempo de estas cosas, igual que nos llevan a visando mucho tiempo del cambio climático y parece que nos suda la pera.
Más allá de pandemia y la música, ¿cómo está Robe?
Muy bien, contento. Los conciertos están saliendo muy bien, con mucha marcha. Tenemos un muy buen rollo nosotros, el público lo disfruta mucho y teniendo como tengo canciones ya esperando para grabar, pues muy contento y con muchas ganas de hacer muchas cosas.
Queda Robe para mucho rato.
Eso espero, eso espero.
A día de hoy, ¿pesa la mochila de Extremoduro? Te preguntarán mucho por aquella gira que no sucedió, te pedirán canciones en los conciertos...
No, no es una mochila, es más un fondo de armario que tenemos. Las he compuesto y me gusta tocarlas. Les hemos hecho arreglos, respetando el sentido de la canción… Otras aunque sean más antiguas, tocarlas en directo y ver cómo lo flipa la gente es donde cobran sentido. Más que una mochila, más que una carga, es un fondo de armario grande donde ir cogiendo temas.
¿Es difícil ponerse a elegir dentro de un repertorio como el tuyo? ¿Da pena dejar cosas fuera?
Sí, hay muchas discusiones. En este caso lo que hemos hecho también es probar las canciones, ver cuáles podíamos llevar a nuestro terreno… Hay que guardar el equilibrio ahí entre cambiarlas mucho o mantener la esencia. Elegir el repertorio consiste tambien en probar mucho las canciones. Un repertorio siempre está abierto. Hay canciones que de pronto dan un subidón en el concierto y las mantienes. Habiendo tanto repertorio, siempre hay algunas que te gustaría tocar y no tocas.
Girando por todo el país y durante tanto tiempo, ¿cómo ves ahora mismo España?
Veo que parece que últimamente hay que cogérsela con papel de fumar. Parece que tendría que haber mucha más libertad que antes y al final es todo como un poco difícil de hacer. la palabra libertad se usa ahora para otras cosas que yo no vengo entendiendo muy bien.
Y en los conciertos, estamos viviendo muchos cambios. Ahora que se acaba la pandemia, es un año difícil porque salimos todos los grupos a tocar y la gente no tiene tanta pasta ni tanto tiempo. Este año está siendo un poco especial, estábamos todos esperandolo pero está siendo difícil para todos.
¿Fue difícil el parón?
Claro que ha sido difícil. Hay mucha gente que se ha tenido que buscar otro curro. Ha sido mucho tiempo y en esta profesión vivimos bastante precario y si no tienes curro, no pillas pelas pero mes a mes, sin ninguna seguridad. Claro que ha sido difícil y por eso te digo que este año también. Estamos currando todo el mundo pero no hay gente para tanto bolo.
¿Conoces algo de Almería?
Conozco el Cabo de Gata un poco. A tocar sí hemos ido veces, pero cuando vas a tocar es cuando menos ves.
Como extremeño, has podido vivir cómo una tierra tiene difícil cosas tan fáciles como viajar en tren, algo que también nos pasa en Almería. ¿Crees que dejaran de maltratarnos algún dia?
Mientras se mire más el dinero que el servicio público, donde hay poca gente se hará mal. No de todo tiene que salir dinero, los servicios públicos no son para hacer dinero y no puedes contar si va a ir mucha gente o menos gente, o si hay trayectos.
¿Impone que hoy escuchen tus canciones hijos e incluso nietos de aquellos primeros seguidores tuyos?
Te da una seguridad, más que imponerte. Me hace mucha ilusión ver en los conciertos gente muy joven, gente mayor, de todas las edades… Por eso fue por lo que en los conciertos empezamos a poner zona tranquila y zona marchosa, porque hay gente de muchas edades, de muchos rollos, de muchas maneras… Hay gente que quiere vivirlo más movido, estando alante, pero tranquilita. Surgió todo un poco a partir de esto, de esa diferencia de edades y de maneras de ser de la gente. A día de hoy lo sigo viendo y me sigue gustando.
El miércoles, Rosalía arrancó en Almería su gira mundial y el siguiente concierto es el tuyo. ¿Cómo te relacionas tú con ese tipo de música?
A mi me gusta otro tipo de música.. Siempre ha habido una música para la mayoría y el rock siempre ha sido para minorías. Ha habido música disco, pop,...Y no ha cambiado mucho: da igual que la llames música disco, pop o lo de ahora. Principalmente música bailable, y de eso siempre ha habido. Lo que ha cambiado es que parece que todo el mundo escucha lo mismo al mismo tiempo, una especie de borreguismo: ves un chavalito, saca una canción y a las semanas tiene más escuchas de las que tú has tenido en tu puta vida con todas tus canciones juntas. ¿Cómo se ponen de acuerdo para escucharlo todo al mismo tiempo? ¿Quién lleva el rebaño? Será envidia, pero no sé… No es en España, es en todo el mundo. No es un caso… Rosalía es un fenómeno, pero es que hay muchos.
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