Juan Antonio Barrios
01:00 • 06 abr. 2012
Las puertas de la iglesia parroquial de San Agustín de los Padres Franciscanos se abrieron a las nueve y media de la noche para que la Real, Ilustre y Franciscana Hermandad y Cofradía de Nazarenos del Descendimiento de Nuestro Señor y Nuestra Madre María Santísima del Consuelo iniciara su Estación de Penitencia hasta las puertas de la Catedral de la Encarnación, recorriendo en silencio el Casco Histórico de Almería, y la Carrera Oficial en el Paseo de Almería.
En perfecto orden y silencio, el diputado mayor de Gobierno, Manuel Hernández, dirigió el cortejo procesional que se inició con la bellísima Cruz de Guía, siendo escoltada por dos faroles que eran portados por penitentes con hábitos y capuchón blancos, escapulario y cíngulo negros, portando cirio el resto de penitentes que forman los dos tramos.
El majestuoso paso de misterio del Santísimo Cristo de la Redención en su Descendimiento, realizado por el imaginero Eduardo Espinosa Cuadros y portado por su cuadrilla de costaleros, procesionó acompañado por la música de capilla Nuestra Señora de la Consolación de Granada.
El tramo del paso de misterio lo cerraban nazarenos portando cruz sobre el hombro, mientras que en el tramo del paso de palio, lo habría la Cruz parroquial con faldón negro, en señal de duelo, escoltada por dos ciriales revestidos de acólitos.
Tras la bandera cruzada del tramo del paso de palio de María Santísima del Consuelo, el original Simpecado daba paso al Guión de la Hermandad, conocida popularmente de Silencio por el juramento que realizan todos los hermanos en el interior de la iglesia de los Franciscanos antes del inicio de la Estación de Penitencia.
Numerosas mantillas y las presidencias, integradas por el secretario de la hermandad, portando el libro de reglas, así como la integrada por la presidencia de la cofradía con el consiliario y párroco de los Franciscanos, Pedro Calvo, y la representación de la Guardia Civil, Hermanos Mayores Honorarios, encabezada por el Comandante Guillermo Visiedo, más un piquete compuesto por dos Guardias Civiles que escoltaron el romántico paso de palio con crestería de la Virgen del Consuelo. Esta imagen la realizó el insigne imaginero sevillano Castillo Lastrucci.
El contraste del silencio con el Descendimiento lo daba la Asociación Cultural la Mezquita de Alboloduy, dirigida por José Vicente Ibáñez, con la interpretación de marchas procesionales características para una hermandad seria o de duelo, como en este caso es la Cofradía del Silencio.
La bellísima imagen de la Virgen, ‘La Niña de Alfareros’, apareció magnífica y adornada por orquídeas blancas en el conjunto del paso, un ornamento realizado por Anémona Floristas.
En perfecto orden y silencio, el diputado mayor de Gobierno, Manuel Hernández, dirigió el cortejo procesional que se inició con la bellísima Cruz de Guía, siendo escoltada por dos faroles que eran portados por penitentes con hábitos y capuchón blancos, escapulario y cíngulo negros, portando cirio el resto de penitentes que forman los dos tramos.
El majestuoso paso de misterio del Santísimo Cristo de la Redención en su Descendimiento, realizado por el imaginero Eduardo Espinosa Cuadros y portado por su cuadrilla de costaleros, procesionó acompañado por la música de capilla Nuestra Señora de la Consolación de Granada.
El tramo del paso de misterio lo cerraban nazarenos portando cruz sobre el hombro, mientras que en el tramo del paso de palio, lo habría la Cruz parroquial con faldón negro, en señal de duelo, escoltada por dos ciriales revestidos de acólitos.
Tras la bandera cruzada del tramo del paso de palio de María Santísima del Consuelo, el original Simpecado daba paso al Guión de la Hermandad, conocida popularmente de Silencio por el juramento que realizan todos los hermanos en el interior de la iglesia de los Franciscanos antes del inicio de la Estación de Penitencia.
Numerosas mantillas y las presidencias, integradas por el secretario de la hermandad, portando el libro de reglas, así como la integrada por la presidencia de la cofradía con el consiliario y párroco de los Franciscanos, Pedro Calvo, y la representación de la Guardia Civil, Hermanos Mayores Honorarios, encabezada por el Comandante Guillermo Visiedo, más un piquete compuesto por dos Guardias Civiles que escoltaron el romántico paso de palio con crestería de la Virgen del Consuelo. Esta imagen la realizó el insigne imaginero sevillano Castillo Lastrucci.
El contraste del silencio con el Descendimiento lo daba la Asociación Cultural la Mezquita de Alboloduy, dirigida por José Vicente Ibáñez, con la interpretación de marchas procesionales características para una hermandad seria o de duelo, como en este caso es la Cofradía del Silencio.
La bellísima imagen de la Virgen, ‘La Niña de Alfareros’, apareció magnífica y adornada por orquídeas blancas en el conjunto del paso, un ornamento realizado por Anémona Floristas.
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