Michael Thomas: “Queremos compartir escenario con los mejores solistas”

La OCAL afronta un nuevo programa de altura, ¿cuáles son las claves de esta Novena Sinfonía con solistas y coro?

Las claves de esta sinfonía se basan, en mi opinión, en la letra de la Oda de la alegría de Schiller, -¡que ese beso alcance al mundo entero!-; en la lucha del compositor con la sordera, en su insistencia para que la pasión gane sobre lo intelectual en el arte, la transfiguración del re menor y sus sentimientos de ‘Sturm und Drang’ (en español ‘tormenta e ímpetu’) que adquiría todo el arte de esta época, y del re mayor como signo de positividad ¿positividad real o para las gradas? Nunca lo sabremos.

¿Qué valoración realiza de colaborar con una institución musical tan destacada como el Orfeón Donostiarra?

El nombre y la reputación de la OCAL están llegando a todo el país y también fuera de él. El otro día un destacado solista suizo nos comentó que, para él, la orquesta no tenía igual en toda Europa. La humildad está presente en nuestras opiniones y declaraciones, pero no en nuestras ambiciones para la orquesta. Queremos compartir escenario, como en los últimos conciertos, con los mejores solistas. Y con la Novena seguimos por esta línea, no solo con solistas cuyas carreras son internacionales, sino con la agrupación coral española con mejores reseñas en el mundo. Otra alegría para la plantilla, la directiva y para mí.

La OCAL se ha acostumbrado a actuar y a rodearse con los mejores, ¿los grandes retos forman parte ya de su ADN?

Sin duda. Siendo como es una organización muy joven, con una plantilla que combina gente experimentada con músicos subidos de las filas de la OJAL, por supuesto no hay límites. Una noche estamos en el Teatro Real tocando Hanns Zimmer, la siguiente en el Auditorio Falla de Granada con repertorio ruso seguido por conciertos con Bisbal. Los excelentes músicos con los que contamos vienen, precisamente, porque saben que el listón sube y subirá de un evento a otro; y eso nos encanta a todos.

¿Qué valoración hace de que Cajamar se implique de esta forma con los proyectos de la OCAL?

Lo comenté el otro día en nuestro concierto de apertura de su nuevo salón de actos en PITA, un espacio escénico dentro del edificio de la entidad, con acústica muy buena y vistas al mar preciosas. Allí tocamos la 5ª sinfonía de Beethoven y era como tocar para amigos porque, aparte de su colaboración económica, los directivos y profesionales de Cajamar con que tratamos se implican al 100 %, no sólo en el proyecto OCAL, sino también en las academias de la orquesta joven y de la orquesta infantil. Saben lo importante que es para una ciudad como Almería tener una orquesta profesional y quieren ver a la OCAL triunfando en todas partes. Vienen a nuestros eventos, nos ayudan con los vídeos de promoción, conciertos, carteles y, lo más importante, vienen con ideas. La verdad es que tocar la 9º para Almería y para nuestros amigos de Cajamar realmente merece un Himno a la Alegría.