La otra cara de Carmen Borja, una estrella almeriense en el Caribe

Nació en la calle Cordoneros de la barriada de Pescadería en el verano de 1970 donde jugó de niña y adolescente a la comba o la rayuela. Carmen cada día presume de su barrio y ser de este mágico rincón de Almería.

Se formó durante 15 años en las Jesuitinas y antes de marcharse a Londres a proseguir sus estudios, conoció a este periodista que les escribe, que pronto destacó en ella sus dos pasiones, el baile y la comunicación. 

Recuerda quien suscribe que, siendo el presentador de un concurso de baile, quedó campeona de Almería en el programa de ‘La juventud baila’ celebrado en la desaparecida discoteca Apocalypsis de Aguadulce, lo que le permitió actuar en el programa de TVE presentado por Silvia Tortosa y Jose Luis Fradejas.

Sus primeros pinitos en el mundo de la comunicación fueron en Radio Juventud, aunque su actividad profesional años más tarde, quedó repartida entre Sevilla, Madrid y actualmente en la República Dominicana. Total, que entre la radio y la televisión, nuestra paisana lleva más de treinta años. Ya como locutora y presentadora de nivel, en su expediente profesional constan trece temporadas en Canal Sur, en la capital hispalense, cinco años en Antena 3 y ocho en la Cadena SER, ambas en Madrid. Carmen Borja, sin género de duda, es un referente de la comunicación.

¿Echa en faltas sus noches pícaras en Canal Sur de 'Noche trasnoche'?

Fueron trece años intensos. Mis madrugadas eran una intensa mezcla de versos dolidos de Sabina, dulces tristezas como las de Norah Jones y locuras perseguibles, como escritas por La Lupe. Todas las madrugadas de una a cuatro de la mañana.  Un continuo latigazo en cada llamada, de la risa al llanto, de lo frívolo a lo trágico, y siempre a lomos de la bendita música.

Y tuvo su recompensa, vamos.

Sí, me dieron el premio Antena de Plata en radio. Y ya estaba alternando este medio con la televisión. De hecho, fui la primera mujer que presentó un ‘talk-show’ que se hacía en directo desde Andalucía, siendo nuevamente premiada con la Antena de Oro a la presentadora revelación del año 1998. 

Y esos reconocimientos, qué duda cabe, a su inquietud le dio alas.

Todo iba bien en Canal Sur hasta que me propusieron presentar la Gala de la Hispanidad, en Santo Domingo en República Dominicana. Fue de una manera un tanto espontánea. Al terminar la gala, estando en el camerino me ofrecieron tres ofertas de trabajo. Me gustó la de Pepín Corripio, uno de los hombres más influyentes de Centroamérica, y encima asturiano. Lo pensé en el avión de vuelta a España, y lo decidí. Me vine a trabajar y vivir a un mundo completamente desconocido. Aquí hago radio, televisión y cine norteamericano.

Y por lo que hemos visto en su historial, está cada día más satisfecha.

Creo que ha sido una de las mejores decisiones que he tomado en mi vida. La República Dominicana, más que un país, es un estado de ánimo.  Mi hijo me acompañó, puso una empresa, y estamos contentísimos de nuestra vida aquí, aunque es muy difícil olvidar nuestra Almería, mi barrio, mis gentes y las cristalinas aguas del Cabo de Gata que no tiene nada que envidiar al Caribe, Quiero mucho a esta isla, pero echo mucho de menos el 'pescaico' y el salitre de su mar.

Usted me parece un pozo sin fin. 

Ya sabe cómo somos los de Almería. Si nos ponemos, nos ponemos. He estado dando cursos de oratoria de 'Cómo hablar en público' para Riu, Catalonia e Iberostar, en México, Panamá y aquí en la República Dominicana y por cierto muy bien acogidos en el mundo de la hostelería a nivel de directores y subdirectores de hotel.

Dice que Pepín Corripio le dio la llave para entrar a lo grande en el mundo de la comunicación en la República Dominicana 

Bueno, a partir de ahí, presenté durante cuatro años 'Tengo una pregunta para usted', un programa parecido al que hacía Lorenzo Milá en TVE. El programa me dio prestigio y respeto, con una fortaleza y atmósfera de trabajo envidiable. Y descubrí mi otra faceta, he hecho siete películas como actriz y en esa onda sigo.

¿Su hijo Luis ha sido uno de sus grandes apoyos para seguir adelante?

Sin género de duda. Luis tiene las grandes virtudes de su padre Luis Carranza, el añorado reportero de TVE, que dio cinco veces la vuelta al mundo y estuvo en cinco guerras con la cámara al hombro. Ha logrado una gran estabilidad y reconocimiento en el sector de la hostelería y especialmente en el grupo Senator. Respecto a su padre se anunció que se le dedicarían una calle en el barrio de La Chanca, por iniciativa de la Asociación de la Prensa de Almería aprobada por el Ayuntamiento de Almería y la verdad es que la promesa no se ha cumplido.

¿Cómo fue su entrada en el séptimo arte?

La primera directora que se fijó en mí para la gran pantalla fue Pilar Távora, en Sevilla, y luego en República Dominicana, surgió a partir de una generosa campaña publicitaria de La Sirena en este país, que es como El Corte Inglés en España.

¿A qué estrellas de Hollywood con las que ha trabajado destacaría por su cercanía y buena relación?

A ver, impone mucho con lo menudita que es Jodie Foster. Me cautivó totalmente Annette Bening. Con JLo tengo un contrato de confidencialidad. Lenny Kravitz es deslumbrante. Josh Duhamel irradia luz natural, pero el regate corto y la empatía que tiene Sonia Braga es indescriptible.

¿Qué ha sido lo más difícil que ha tenido que superar?

Lo intento superar cada viaje que cruzo el océano y me sigo cosiendo el corazón con hilo de pescar, que es más resistente. Siempre me voy con el pellizco de un teléfono que pueda sonar, al otro lado del mundo, y no poder llegar a tiempo.

¿Recuerda quién le dijo aquello de ‘Nena, tú vales mucho’?

Afortunadamente, tan literal, nadie. Pero he de reconocer, que confiaron mucho en mí Miguel Ángel García-Juez, Jose Ramón Pardo y Jaime Polanco.

¿Cuánto tiempo hace que no va por Serón?

Pues estuve el verano pasado, extraño los embutidos de Peña Cruz. Le tengo inmenso cariño al pueblo de mis padres y encima esta Navidad han hecho Carmen y Roque ¡¡¡¡¡75 años de casados!!!!! ¡Santísimo! Qué campeones, con sus cabezas divinas. ¡Me parece grandioso ! La ceremonia se celebró en la iglesia de San Roque. Allí se casaron, me bautizaron e hice la primera comunión.

¿Se acuerda de amigos y compañeros de aquellos años en Almería?

¿Qué dice, por Dios? Cómo me voy a olvidar de toda ese gente con la que crecí y compartí años de la niñez, la adolescencia  y gentes de la radio que me dieron la mano cuando empecé a dar los primeros pasitos en aquella  entrañable Radio Juventud de Almería, Canal Sur, etc. Sabes que cada vez que vuelvo a Almería suelo ir a veros a muchos de vosotros. 

Carmen tras una corta estancia en nuestra capital por motivos laborales retorna de nuevo a la isla de Santo Domingo, pero con sus palabras ha querido dejar muy claro lo que para ella es Almería. ¡Una tierra llena de contrastes y de rincones llenos de encanto, en la que merece la pena perderse! Lo dicho: Carmen Borja es una estrella almeriense en el Caribe.