Antonio García Soler dedica un libro de poemas al paso del tiempo

El paso del tiempo. El desarraigo de la tierra y de los seres queridos. La ausencia del padre y de los antepasados. El valor de la amistad. Son algunos de los temas que palpitan en las páginas de ‘Los demás días’, el libro de poemas del profesor Antonio García Soler (El Real de Antas, 1961) que acaba de publicar el Instituto de Estudios Almerienses. El volumen se presenta hoy a las 20 horas en la sede del IEA, en la Plaza Julio Alfredo Egea de la capital.

Aunque su producción ha sido incluida en antologías como ‘Poesía almeriense actual’ (Almería, 1992), ‘Octubre’ (Murcia, 1997), ‘El laberinto de Ariadna, diez años de poesía’ (Barcelona, 2008) y ‘Donde no habite el olvido’ (Madrid, 2011), éste es el primer libro de García Soler, que ha vencido la timidez y la modestia y, animado por los amigos, ha recogido una serie de poemas escritos entre finales de los 80 y la actualidad.

Sencillo y sugerente
“Quería que el título fuera sencillo y sugerente. ‘Los demás días’ es una forma más clara de hablar del misterio del paso del tiempo. Aunque los poemas fueron escritos en momentos distintos, he intentado que exista una unidad temática”, indica el autor en una entrevista a LA VOZ.

Según confiesa, siente un enorme respeto hacia la poesía y los poetas. “Como lector que soy, busco decir algo que está dicho ya, pero que se puede decir de otra manera. En esos intersticios intento moverme. Es como una pequeña nota al pie”, expresa.

El libro ha sido prologado por el escritor y editor granadino Francisco Domene, cuenta, en la portada y en su interior, con dibujos de Juan Cano Imbernón y será presentado por Pilar Quirosa-Cheyrouze, filóloga y escritora, y el director del IEA, Rafael Leopoldo Aguilera. Asimismo, el acto contará con un broche de excepción, las canciones de Sensi Falán, la dulce voz de La Chanca.

“He tenido una muy buena acogida y la colaboración del personal del IEA. Hacer un libro lleva lo suyo. Francisco Domene, que es un poeta fabuloso, ha escrito un prólogo con mucho cariño y desde la visión de lector, algo que me parece muy apreciable. Incluye una referencia muy interesante al vino, en la que compara leer un poema y degustar una copa de vino. Los dibujos del pintor y dibujante Juan Cano Imbernón parece que están hechos ‘ex profeso’, aunque no es así. En definitiva, ha resultado la edición minimalista y sobria que deseaba”, señala García Soler.

Colaborador de Argaria
Licenciado en Filología hispánica, profesor de Latín y de Literatura en Elche y director de un taller de escritura creativa en Almansa, es un estrecho colaborador de la Asociación Cultural Argaria de Antas. De hecho, ha participado en actividades del colectivo, como el homenaje a Miguel Hernández con motivo del centenario del nacimiento del poeta, la recuperación de la memoria de Antonio Jesús Soler Cano o la presentación de ‘Poesía’ de Michel Houellebecq, junto al filósofo Antonio Muñoz Ballesta y el propio escritor francés.

“Siempre trato de volver a Almería y reencontrarme con mis orígenes. Los almerienses que estamos fuera notamos esa fuerza de la tierra y el mar de la que hablaba Juan Goytisolo. Voy a menudo para allá, donde vive mi madre. Mis regresos son una constante. Me gustaría que este acto fuera un reencuentro con los amigos, ojalá”, concluye el escritor.