Teatro en femenino plural

Mujeres preparando una boda y padeciendo las consecuencias del rito social. Mujeres compartiendo la delicada intimidad del hamman. Mujeres sobreponiémdose a la dictadura del nacionalcatolicismo. Muejers encarnadas en el universo femenino de Lorca. Mujeres compartiendo la insoportable gravedad de los deseos y las frustraciones en plena edad crítica. Mujeres de fantasía recorriendo la ciudad con sus mejores galas. Mujeres...

Seguramente sin proponérselo, porque no ese su objetivo, el Festival de el Ejido de este año está ofreciendo un corolario sobre la figura femenina en el teatro actual. Pero también, una especie de retablo para abrir reflexiones más allá de los límites del escenario.

‘Lastres’
El próximo viernes, la compañía Pentación presenta la obra ‘Lastres’, en la que tres mujeres que transitan hacia la madurez recapitulan sobre sus vidas para explicarse entre ellas. El éxito cosechado por anteriores montajes en torno a la mujer en clave de “comedia inteligente” puede ser la referencia para este espectáculo. Sin embargo, esta pieza escrita por Jorge Roelas aporta algo más: utiliza el recurrente espacio de la amistad femenina para revisar el traspaso de valores de una generación a otra. Este fenómeno, de decisiva importancia moral y social, adquiere toda su dimensión y profundidad en la experiencia y el discurso de unas mujeres, cosa que nadie podría discutir.

Después de ‘Lastres’ viene ‘Casting. A la caza de Bernarda Alba’ de Teatroz, un musical de evasión, pero que, sin duda, se apoya en la trastienda trágica que representa el personaje inmortal de Lorca aludido de forma expresa. Y después, Axioma hará su homenaje a la fantasía con ‘El paseo de las damas’, un desfile de cortesanas con todas sus galas, entre la poesía y el humor.

La Cubana
Todo empezó con la deslumbrante y genial inauguración de la muestra a cargo de La Cubana y sus ‘Campanadas de boda’.  Dos hermanas que trataban de organizar la boda del siglo para exhibir su prestigio social, propósito éste que desencadena conflictos familiares en un ámbito de protagonismo femenino casi exclusivo. La pieza, más allá de la comedia, desmenuza con escrupulosa precisión las aspiraciones femeninas de una generación frente a las ilusiones de la siguiente encarnadas en la novia.

Después, una propuesta original en forma de teatro sensorial sólo para mujeres. Al parecer, una recreación de la experiencia del hamman, en ‘La piel del agua’. Sin comentarios.

Siguió a esta pieza sólo para mujeres ‘El manual de la buena esposa’ que vino a ser una especie de aperitivo para enfrentarse una vez más a ‘Yerma’: su  protagonista resuelve su tragedia personal de la maternidad imposible con un asesinato. La exigencia de ser madre abre en el drama lorquiano una disyuntiva sin solución entre el impulso vital y la imposición social.  ‘Yerma’ sigue siendo una referencia imprescindible para profundizar en las claves de la aventura histórica de la mujer, más allá del contexto temporal y social.

En resumen, el teatro sigue siendo una imprescindible ventana para asomarse a nuestro propio interior como civilización.