El acto de clausura del II Curso de Realismo y Figuración que el reconocido pintor Antonio López ha impartido en el Museo Casa Ibáñez fue todo un homenaje hacia su persona. Y es que la huella que ha dejado el artista manchego en el Valle del Almanzora ya es imborrable.
Muestra de ello es el anuncio que ayer realizó el alcalde de Olula del Río, donde se ubica el museo. Antonio López será nombrado hijo adoptivo de esta localidad. Por si esto fuera poco, Gabriel Amat, presidente de la Diputación, anunció que la Administración provincial propondrá al pintor realista para la Medalla de Oro de la Cultura de la Provincia.
Pero aún quedaba más por saber. El presidente de la Mancomunidad del Almanzora adelantó que Antonio López recibirá el premio Cultura en los próximos Premios Almanzora. Queda demostrado así que la aportación de Antonio López va más allá de su presencia en los cursos. Como ejemplo, quienes visiten el museo desde este mes podrán contemplar ocho obras que ha cedido a los fondos del centro.
Entretanto, los 35 alumnos de esta segunda edición del curso impartido por Andrés García Ibáñez y Antonio López, recogieron sus correspondientes diplomas tres una semana de trabajo siendo asesorados por los dos grandes pintores.
“Legado colosal”
“Este es uno de los días más emocionantes de mi vida” reveló Andrés García Ibáñez, que también se refirió a la importancia de las ocho obras cedidas. “Es el gran maestro del realismo en el mundo. Se queda un legado colosal”, aseveró. El presidente de la Diputación, Gabriel Amat, recordó la ayuda que la Administración presta a este centro como un compromiso ineludible con la cultura provincial. “Queremos que Olula y el Museo Casa Ibáñez sea conocido por su belleza, por su trabajo y por las maravillas que tiene. Nos tenemos que sentir todos orgullosos”.
Por su parte, el subdelegado del Gobierno, Andrés García Lorca, reconoció sentirse “emocionado” por haber conocido “al gran Maestro” y alabó la decisión de la Diputación al “apostar por el Museo Casa Ibáñez”.
Cosentino (cuyo presidente estuvo presente durante todo el acto) ha sido precisamente otra de las instituciones que han apostado y hecho posible la realización de este curso. En su nombre habló el director de Marketing, Santiago Alfonso, quien expresó que es “una satisfacción enorme” colaborar “con una iniciativa única e irreemplazable”. En un tono igual o aún más humano, tanto el alcalde de Olula del Río, Antonio Martínez Pascual como el presidente de la Mancomunidad, Antonio Salas, elogiaron la “humildad” y la cercanía de Antonio López. “Esto es el fruto de un trabajo que no es de un día. Tenemos un gran museo gracias a la generosidad de Andrés García Ibáñez”, explicó el regidor.
Para finalizar el acto poetas almerienses como Juan José Ceba, Javier Irigaray o Julio Alfredo Egea entre más de una decena, recitaron obras propias en homenaje a Antonio López que han quedado plasmadas en una publicación realizada con la ayuda de Cosentino. La cantante Sensi Falán puso el broche de oro entonando su poesía al ritmo de la guitarra. Mientras, el pintor tomellosero presenciaba sin pestañear cada una de las intervenciones. No hubo ningún adiós. Antonio López volverá en breve a la que ya también es su tierra.
Antonio López: “Lo más bonito han sido los 5 días que hemos vivido juntos”
El pintor hiperrealista fue el encargado de cerrar la ronda de discursos que previamente habían realizado las autoridades que el viernes visitaron el Museo Casa Ibáñez. La intervención de Antonio López se centró sobre todo en el transcurrir del curso que ese día se clausuraba y la convivencia con los artistas llegados hasta Olula del Río, más allá de los elogios y los futuros premios anunciados. “Que sepáis que ya me voy premiado por el hecho de estar haciendo algo con mucha dedicación, mucho amor y que me enseña”, manifestó. La presencia en el curso de pintores llegados desde diferentes partes del mundo como Chile o Italia. El artista de Tomelloso aseguró acerca de la actitud de los asistentes que es algo que le parece “emocionante” y una forma “de ir por el mundo que tendría que contagiarse a muchas más cosas”.
En cuanto al Museo Casa Ibáñez, Antonio López alabó el apoyo prestado al centro cultural y el esfuerzo del propio pintor olulense. “Me parece una maravilla que aquí haya surgido un museo como el Casa Ibáñez. Me parece una suerte para vosotros que este hombre esté aquí y me parece una suerte para él que tenga vuestro apoyo. Lo más bonito han sido los cinco días que hemos vivido juntos”, concluyó el reconocido pintor realista.
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