Un Almería de cristal

Los servicios médicos del Almería tienen faena. Esta temporada el que no llegó lesionado en verano caía en un entrenamiento o en un partido. La sala médica está siempre bien concurrida. Algo se estará haciendo mal para que haya tantos lesionados.

Hoy con tanta tecnología punta y tantos componentes en un cuerpo técnico no deja de ser preocupante que hayan pasado la mayoría de los futbolistas por los médicos del club.

Las temidas lesiones musculares se llevan la palma y lastran a una plantilla que no es precisamente abundante. Ha pasado con Ramis y está ocurriendo con Lucas Alcaraz.

Seguro que se trabaja bien en lo físico y la plantilla asimila bien el trabajo, pero en Barcelona habló Lucas de un equipo que no iba al límite y se le hizo largo el partido.

Me consta que el nuevo preparador físico ha evaluado el estado global de sus futbolistas y habrá emprendido un plan adicional para que no se le ‘rompan’ los futbolistas.

Van cayendo uno detrás del otro y así es muy complicado armar el equipo que pretende el nuevo entrenador rojiblanco. A poco que le mete ‘caña’ al equipo los jugadores se rompen: menudo problema.

Uno no entiende de puesta a punto pero los que ahora están en el banquillo del Almería tienen sobrada experiencia en saber dónde puede estar el problema.

El carrusel de lesiones no cesa y en ataque solo nos queda sano Juan Muñoz que vino al Almería tocado físicamente pero se curó a tiempo y es ahora la única esperanza ofensiva.

Caballero se lesionó tirando a portería mientras que Hicham en una carrera para buscar un balón. Las lesiones en la medular son para Tino Costa y Verza que han repetido visita a la sala médica.

Algo se ha debido de hacer mal para que haya tanta lesión en el Almería.