El Ayuntamiento quiere convertir Tabernas en un Parque Natural

¿Y los vecinos? ¿Qué dicen los vecinos ante la proposición de sus autoridades de pasar de paraje a parque el hermoso desierto de su pueblo? El desierto de Tabernas es uno de los paisajes más hermosos, exóticos, irresistibles y desolados de nuestro país.
Es imposible no sentir ante su inmensa fuerza que se está ante algo grande, ante una latitud sorprendente y desconocida para el ojo humano. Lo que extraña es que estas secas y fastuosas tierras de nuestra Almería no sean parque natural desde hace lustros.
Con todo, sigo pidiendo lo mismo, ¿les han preguntado a los vecinos? Y antes de ello, ¿les han explicado lo que supone ser parque natural? Les han contado los problemas a partir de entonces para sus propiedades, sus tierras, sus cortijos presentes o de futuro. Creo que se hace necesario que los vecinos de Tabernas estén enterados de los cambios que se van a producir en y con sus propiedades.
Hablen con los vecinos de otros municipios y que les cuenten sus experiencias. Y una vez que estén bien informados, que conozcan los pros y los contras, que se les consulte en una votación libre si de verdad quieren que Tabernas cambie de paraje a parque natural. Y si así lo deciden los vecinos, a disfrutarlo, cuidarlo y vivirlo.
Lo de meterle a los ciudadanos, como hicieron con los de otros pueblos por narices dentro de un parque, engañados las más de las veces, no parece de recibo en los tiempos democráticos que corren. ¿O no estamos en tiempos democráticos?
Se les llena la boca a los políticos de democracia y de que son los pueblos, los ciudadanos, los que tienen el poder de decidir sobre sus vidas y sus haciendas, pero a la hora de la verdad nos tratan como a bobos de babero, a los que no se les pueden decir las verdades: ¡No están preparados, pobrecillos, ellos qué saben lo que les interesa! ¡Vosotros sí que lo sabéis! Los mejores especialistas en engañar a bobos es lo que sois, pero me parece que se os acaba el cuento, que el ciudadano ya no se fía y quiere notar la herida en la palma de la mano y las ventajas e inconvenientes del parque en letra impresa y con compromisos claros. Lo que no hicieron por ejemplo con los vecinos de algunos pueblos del Andarax al incluirlos con nocturnidad y alevosía en Sierra Nevada.