Las primarias de Almería

Militantes de Almería ciudad, desde que supimos por la prensa, que se había producido una afiliación masiva en la agrupación de la capital (En una agrupación de poco más de ochocientos militantes, se produjo una avalancha de cerca setecientas solicitudes de afiliación), solicitamos al secretario general de la Agrupación, Fernando Martínez, una asamblea para que se aclarara esta situación antes de que empezase el proceso de primarias. 

Como todos sabemos, la petición cayó en saco roto, no se convocó asamblea. Y más lamentable aún, desde una perspectiva no ya democrática sino de simple cumplimiento de los estatutos, sigue sin convocarse esa asamblea que por estatutos tenía que haberse convocado en los primeros seis meses del año. 

Algunos quieren cerrar en falso un proceso que ha sido una verdadera chapuza. Me explico. Se inició el proceso sin que los candidatos, que por cierto en principio eran tres, pero que por razones no aclaradas, finalmente terminaron siendo dos, tuvieran el censo definitivo. Pero no quedó ahí la cosa, en medio del proceso de primarias y en sucesivas tandas se eliminaron del censo más de doscientas de las solicitudes, a pesar de todo ello el censo se incrementó en más de un cincuenta por ciento. 

Celebradas las primarias, sin explicaciones a los militantes en una asamblea, y con las consiguientes amenazas a los compañeros que demandamos explicaciones en los medios de comunicación, se obtiene que resultado que de todos es sabido. No faltaron en seguida las voces que reclamaban sanciones y la dimisión de Juan Carlos como portavoz, y cuando este, de forma inmediata, formalizó su renuncia a la portavocía del Grupo Socialista, rápidamente salieron las mismas voces pidiendo que también dejase la concejalía porque era lo que exigían los nuevos estatutos del partido. El compañero Juan Carlos en un gesto que le honra y que ha sido su divisa a lo largo de su dilatada e intachable vida política así lo hizo. 

Aún estoy esperando que las mismas voces que pedían esa coherencia para el compañero Juan Carlos, hagan lo propio con quien tiene dos cargos orgánicos y uno institucional, que aunque sólo fuera por distancia ya parecen bastante incompatibles. 

Pero lo más sorprendente es que se siga sin convocar una asamblea, que ya en su momento se reclamó con las firmas de más de trescientos militantes de Almería ciudad, y que además es una exigencia de los estatutos. La asamblea se debe convocar y ya no sólo para aclarar las numerosas deficiencias habidas en las primarias, sino también para aclarar si la agrupación puede seguir siendo dirigida por un compañero con despacho en Madrid. Espero que todo esto lo podamos debatir en asamblea y no como sucedió con las primarias a través de los medios y las redes sociales.