La Lotería del AVE no ha tocado este año

El soniquete de los niños de San Ildefonso nos situó este jueves a las puertas de la Navidad, la primera Navidad, después de dos años de pandemia, en que la normalidad parece haberse instalado para siempre en nuestras vidas.

Llega la Navidad y con ella los buenos deseos de que el año 2023 sea mejor para Almería que el que está a punto de decirnos adiós. Sin ir más lejos, esta misma semana se han aprobado los presupuestos generales del Estado y de la Junta de Andalucía, y ello quiere decir que habrá dinero contante y sonante para obras que se vienen reivindicando desde siempre como es el caso del AVE o la Autovía del Almanzora.

Y esta misma semana el AVE ha llegado en forma de regalo anticipado del Gordo de Navidad a la vecina Región de Murcia. Envidia sana hemos pasado quienes un día sí y al otro también nos empeñamos en que las comunicaciones dejen de ser un obstáculo para que sigamos creciendo más como provincia.

No seré yo quien no reconozca que los murcianos llevan también décadas reclamando una conexión ferroviaria de Alta Velocidad con Madrid y el resto del Levante español y que querían que el AVE llegara a su capital de manera soterrada, como se les prometió el siglo pasado, pero también es justo recordar que casi se van a cumplir 40 años desde que Almería quedó descolgada del resto del Levante por ferrocarril porque en Madrid alguien decidió levantar las vías de la línea Guadix-Almendricos y dejarnos sin conexión con Murcia.

No había demanda para la circulación de esos trenes fue el argumento que se dio en 1984 para cerrar la línea. Pues ahora, hay más que demanda para que por la otra línea, la de Linares-Baeza, hacia Madrid vayan más trenes de pasajeros y la operadora Renfe retrasa y retrasa el segundo Intercity, el de la tarde. ¿Es que siempre compramos en esta tierra los números que alguien no mete en los bombos de la lotería?

Feliz Navidad.