El Torreón de San Miguel en Cabo de Gata

Buceando en la historia descubrimos  que existió una fortaleza conocida como “El Torrejón” o “El Torreón” y que fue destruida por un terremoto en 1658. No fue hasta 1756 cuando, dentro del plan de fortificación de nuestras costas y con el objetivo de proteger a los poblados de Las Salinas y La Almadraba,  el Rey Fernando VI mandó levantar la actual Torre. Como se puede contemplar, la construcción tiene forma cónica y consta de dos plantas más el  mirador que se comunican por unas escaleras. En el Siglo XVIII estaba defendida con artilleros, soldados, dos torreros e incluso con dos cañones, pero, a comienzos del XIX (Guerra de la Independencia) es abandonada. No sería  hasta después de la Guerra Civil  cuando pasara a la Guardia Civil (1941).

Por otra parte,  en Almería ya estamos más que acostumbrados a las promesas incumplidas y a la falta de coordinación y entendimiento entre las diversas administraciones. Hace poco más de un año escribía en este mismo periódico sobre la situación de deterioro y abandono del Torreón del Cabo para intentar alzar nuestra VOZ y hacer realidad la urgente restauración de este Bien de Interés Cultural  pendiente de la cesión, por parte de la Administración Central  (Servicio Provincial de Costas) al Ayuntamiento. Incluso se nos decía que el Convenio de Cesión estaba aprobado el 3 de Julio de 2018. Pero ¡qué sorpresa! cuando el pasado mes leía en este periódico: “preguntado el Servicio Provincial de Costas por la situación en la que se encuentra esa posible cesión del torreón, aseguran que en el expediente que obra en Almería no hay petición alguna de cesión realizada en el año 2018”. ¿Qué es lo que es? Respuesta: Almería.

El proyecto de restauración y puesta en valor se incluía en el Plan Turístico de Grandes Ciudades (que incluye una partida para rehabilitar el edificio que tendría que ejecutar el Ayuntamiento). El citado Plan se iba a desarrollar en este 2023-2024. La idea de convertir el Torreón en un Mirador, en un Centro de Información turística que revalorice el barrio de Cabo de Gata e incluso en un Museo de Pesca parece no interesar a nadie.