La otra feria de Luis Rogelio

Existe otra feria de Almería. Y si de la primera, la de las luces de colores, globos, carrozas y fotos se hace responsable para su bien el alcalde, de la segunda también debe ser él el que se lleve las vergüenzas. El aparcamiento ferial por él decidido estaba hasta los topes la noche del martes, 21. A dar vueltas. O volver al centro y coger autobús o taxi. Lo que no nos podíamos esperar es que los chicos de María Muñiz, la Policía Local, se iba a poner las botas con tanta multa como pudieron poner. Luis Rogelio no consigue más aparcamientos para los ciudadanos, y manda a María a que la policía consiga algunos miles de euros para las arcas municipales. Filas de coches todos con el agradable anuncio de los chicos de María Muñiz. Supongo que las multas no era cosa de ellos, alguien debió dar la orden. ¿María, Luis Ro? No se quedaba la cosa en la multa. Cuatro grúas rondaban el ferial para llevarse los coches que estaban encima de las aceras. Y se dieron historias para todos los gustos. La de un matrimonio de Gádor, con dos hijos, que al ir a por su coche tras unas horas en el recinto se enteran que se lo ha llevado la grúa. Así tratan a tus vecinos en la capital, querido Eugenio. Tu dirás que no hubiera aparcado en la acera. Tienes razón. También tu colega de la capital tendría que haber previsto más aparcamientos. Coge un taxi, mete a la familia y vete a sacar el coche del depósito. El año que viene va a ir a la feria de Luis Ro el alcalde de Gádor. Él seguro que tiene aparcamiento y gratis. Por cierto, me sabría decir alguien los aparcamientos que se ha reservado Luis Ro para la gente política del ayuntamiento y sus amigos.