Mujeres, sal de la vida

Volverán las oscuras golondrinas en tu balcón sus nidos a colgar, pero aquellas que el vuelo levantaron, esas  ¡no   volverán!”. Perdón por alterar la rima. Bien es verdad que mi simpatía giró  al Socialismo desde muy temprana edad pero, “lo cortés no quita lo valiente”, por ello me dirijo con respeto y cariño a la Reina de España. Dejó en su largo caminar usos, costumbres e incluso hubo de adaptarse a una religión del mismo origen pero separada por un cisma. Junto a ella, sencillamente bueno, el Rey, que no para mientes en inmolarse. Dios les bendiga.

 Pilar Pérez, numen y amor sonriente “como habla con las estrellas nadie la quiere escuchar,  pasa recogiendo flores y caracolas del mar”. Moisés García Toledo y Jésica García Ruiz tienen la suerte de tener tres hijas cual ramo de flores de variados colores. La primera, Jésica García, con doce años, un preámbulo de mujer. Moisés, con cuatro y la benjamina con tres,. donde todavía habita el candor. El padre con gran dinamismo y sin menosprecio de los demás está al tanto de su clientela, rápido y feliz, en La Cafetería Ángelo.

 Karmen Romero, polifacética: “Brinda la miel con suave movimiento, el oro de su fruto a la alborada. La avecilla, entre la enramada, encendidas de amor, lanza su acento”. Conchy Ayala, Mari-Carmen Castillo y Tamara Ferrer, me quedo con su belleza para depositarla en un búcaro de China que me regaló mamá. Antonio Cayuela Sánchez y María López Tapia, con una coordinación casi perfecta en su día a día, tienen dos hijos Antonio y Rocío; él con l5 años y ella con 17.

Los niños María del Mar Mañas Uclés, de 10 años -más que promesa, pugna por ser mujer de bellos encantos- y su hermano Carlos, un ser de 5 años, ojos limpios y encantos naturales. 

Antonio Uclés y Pepi dieron a este jodido mundo a Antonio José y Alejandro, de los que se sienten orgullosos y yo doy fe, al tenerlos cerca de casa.

Estaba sumido en el tedio y nuevamente el teléfono; al escuchar la cantarina voz de Mari-Luz Segovia mi espíritu se relajó de inmediato.

Dejé en mi artículo anterior a dos damas meciéndose en nubes de algodón. Ellas son, por orden de antigüedad en el conocimiento, Pilar Pérez, cuyo contacto telefónico es continuado y yo la admiro como poeta, con ráfagas de madre. La otra es la que me atiende como médico; su paciencia es digna de encomio, su nombre es una  Purificación. Y tiene poderes sobrenaturales. Ella y su esposo están  siempre soñando con su nietecita Marina.

Julio Nuevo Lara, un hombre digno de muchos laureles. Está triste como yo al saber que Lina, su enfermera, está muy malita. Rezo con mucha fe para que se recupere.

Obispo de Almería: quiero verte y  debatir entrambos asuntos de interés común. Para evitar tu intriga se trata de Resurrección Galera. No pretendo faltarte el respeto con el tuteo es que los diferentes ...ísimos me repelen. A nosotros –me refiero a mi familia- nos basta con tres dones del Espíritu Santo. Con ellos trataremos de entendernos tu y yo. Un cariñoso saludo.