Almería, capital Berlín

Hay titulares que en en su brevedad inevitable expresan una realidad con mas rotundidad que un amplio articulo. El elegido por Jacinto Castillo y Antonio Fernández para el especial de Agricultura 2000 sobre Fruit Logistica - Almería capital Berlín- resume con rotundidad esa realidad.

Durante tres días la agricultura almeriense ha convertido la ciudad alemana en su escaparate y en su escenario internacional de negocio. Como todos los años desde hace décadas, la provincia ha mostrado en un territorio no hostil pero sí competitivo su voluntad de continuar la conquista interminable de los mercados europeos.

Este año la crisis ha pasado su factura. Los expositores han reducido su presencia influenciados por una necesaria reducción de costes y, quizá también, por la oferta competitiva de Fruit Atraccion. En cualquier caso la reducción de stand y su austeridad estética ha tenido contrapunto en la numerosa presencia de empresarios agrícolas, acercándose al medio centenar.

Allí estaban todos o casi todos. Y en todos se respiraba un clima de moderado optimismo. La campaña no va mal y las expectativas se presentan alentadoras.

Ya sé, ya sé que los empresarios, por la propia incertidumbre de su trabajo y por la prudencia que el interés inteligente aconseja, nunca son (en la agricultura o en cualquier sector, pero más en la agricultura) proclives a la satisfacción, pero en las cuarenta y ocho horas berlinesas hay tiempo suficiente para hablar con ellos y encontrar en sus argumentos no solo el pretexto de la queja interesada, sino el texto que refleja la realidad.

Y una de las cosas que más me ha llamado la atención es la sintonía entre algunos de los más importantes representantes del sector y el consejero Planas.

El presidente de Casi, Jose Antonio Andújar, aludía en la mañana del miércoles a la necesidad de innovar como único camino para que nuestros competidores no reduzcan la distancia que ahora les separa de nosotros. Lo hacía apostando por la concentración del sector y también por la calidad.

“Hay que mirar -decía- hacia el consumidor del norte, no hacia el competidor del sur y la crisis es un buen momento para ampliar esa diferencia con nuestros competidores. Nosotros podemos ofertar calidad, ellos precio, pero el comprador exige y cada día va a exigir más la calidad. Marruecos y Turquía no llegarán a ser un problema  grave si nosotros hacemos lo que tenemos que hacer y ya estamos haciendo. Por ejemplo, CASI ya tiene integrada el 80% de toda su producción, a eso no podrá llegar nunca Marruecos que depende muchísimo de productos fitosanitarios “.

Esa opción de mirar al norte y no al sur, esa estrategia de mirar al frente y no estar pendiente permanentemente del retrovisor  es la misma que defendió el consejero Luis Planas en su encuentro periodístico con La Voz.

Pero no hay que contentarse solo con mirar al norte y no al sur. También hay que mirar los nuevos gustos del consumidor. Una obsesión permanente de Paco Sabio de CERVA y que se plasma en la  búsqueda de nuevos productos o adecuación de los ya existentes a las nuevas demandas del consumidor y a las nuevas tendencias de consumo. 

El expositor situado en los stand de Unicagroup y Vicasol fueron el mejor catálogo de cómo cada vez más se pueden adecuar los productos a las nuevas tendencias del mercado. Una apuesta que como señalaba José Bono, de Aneecop, es la que a ellos les va a suponer subidas de dos dígitos, situación en la que también se encuentra Vicasol representada en Fruit Logística por su presidente, Juan A. González Real, y su gerente, José M. Fernández Archilla. También me ha sorprendido que los stand de Marruecos o Turquía no han brillado en la Messe berlinesa de este año por su atractivo, ni en productos ni en estética. En el recorrido por la Fruit Logistica de este año sí ha habido un detalle que no ha pasado desapercibido para muchos de los almerienses que allí han estado. 

El detalle puede ser considerado anecdótico pero, en el fondo, revela una categoría que induce al desaliento: a lo largo de todo el espacio dedicado a la producción agricola  de nuestro pais no he encontrado ni una sola bandera española ni el nombre de España. No sé si será torpeza o estupidez nacionalista. De lo que estoy seguro es de que es un error. España es una marca agrícola extraordinariamente competitiva y habría que ser muy torpes para no darse cuenta de ello.