Nada es lo que parece

Tenemos un Gobierno experto en ofrecer cifras y datos de todo tipo que inducen a pensar que lo que está ocurriendo en este país – los millones de parados que registran las oficinas de empleo o los gravísimos recortes que se han aplicado a los servicios públicos- ha sido un mal sueño del que ya nos hemos despertado.

Nada más lejos de la realidad. Uno tras otro, los ministros de Rajoy van quedando en entredicho con los datos reales que vamos conociendo de su gestión. Sin ir más lejos, una de esas realidades que el PP ha tratado de ocultar durante meses ha desvelado la verdadera cara del propietario de la cartera de Educación. 

José Ignacio Wert no ha tenido más remedio que reconocer, tras hacer el ridículo una y otra vez – lo intuíamos pero ahora sabemos que lo hizo a conciencia- que su departamento redujo en 75 millones de euros el dinero destinado a becas en el curso pasado.   

A la luz del estricto dato, la explicación posterior de su número 2, la secretaria de Estado de Educación, resulta aún más desoladora al descubrir que se recortó unos 300 euros de media el importe de las becas a los alumnos… Si en lugar de un artículo esto fuese un video, aquí sería el momento en el que entrarían los aplausos.

El Gobierno de Rajoy se ha empleado a fondo en hacer blanco lo negro, con el convencimiento de que si se repite una mentira las suficientes veces ésta terminará pasando por verdad. Ha ocurrido con las cifras del paro, con los datos macroeconómicos, de los que aseguran que nos llevan en volandas hacia una recuperación que, eso sí, no nota aún la calle. Pero ¿quién se supone entonces que debería notarla?    

En Almería, al menos, esto no ha sido así durante un verano en el que se habían puesto muchas expectativas ante el repunte del turismo. Sin embargo, los datos del paro de agosto dicen todo lo contrario: hemos alcanzado una cifra récord de desempleo. Pero sigan, sigan con el cuento.